RECESIÓN
Una mañana encontró a su perro peinándose frente al espejo del baño. Le pidió que no le usara todo el gel y le dejara un poco de pasta para cepillarse los dientes. Entonces Gascoigne (pronúnciese Gazza), no desayunó y salió rápido a encontrar trabajo. Volvió unas horas después, derrotado y aún desocupado, con una bolsa de trocitos por la mitad, una boleta de Telequino y el viejo rosario de su abuela...
Excelente "contar" de tu estilo, chinito, mostrando una cosa mientras nos hablás de otra cosa...
ResponderEliminarAbrazo y aplausos.
Seguramente a Gascoine lo han engañado, el telekino es otra trampa...( habrà alguna màs?)
ResponderEliminarFelicitaciones Josè, es esclarecedor leer tus obras. Abrazo desde Olavarrìa.
Jaja... seguramente, cumpa Mauri. Voto que afuera estaban las más trampas (quini6, loto, etc... :)
ResponderEliminarAbrazo y grande el chinito Castro, siempre recreando nuestras pequeñas y duras historias argentinas.