lunes, 20 de diciembre de 2010

Ronaldo Ransenberg-Buenos Aires, Argentina/Diciembre de 2010

EL VERDUGO

                                     EN UNA CALUROSA TARDE
DEL 1800, EL VERDUGO , LUEGO DE CUARENTA AÑOS
DE TRABAJO, SE JUBILO CON LA ULTIMA CABEZA ; QUE
LENTAMENTE RODO SIN PAUSA NI PRISA.
     SU TAREA FUE LIMPIA E IMPECABLE, EL HACHA
MANEJADA CON GRAN MAESTRIA CONTRIBUYO PARA QUE
LOS CONDENADOS PASARAN AL OTRO MUNDO SIN
SUFRIMIENTO.
      CUANDO RECIBIO LA MEDALLA DE LAS AUTORIDADES,
SE SINTIO FELIZ. CONVENCIDO DE SU CONTRIBUCION A LA
LIBERACION DE MUCHA GENTE DE SU INCOMODA VIDA, EN
AQUEL IGNOTO PUEBLO DE FRANCIA; Y SE CONVIRTIO EN
UN PROCER.

No hay comentarios:

Publicar un comentario