cuando la tormenta,
poníamos baldes bajo los filtros
de la galería.
madre nos lavaba las manos
con el agua fresca
y los hermanos
guardábamos las gotas
en las cartucheras
con bramidos de mar
y puertos cobrizos.
después
poníamos en un baúl
de lata,
el rojo, el amarillo,
un charco de luz
y todo el dolor
cerrado y junto.
Susana:
ResponderEliminarEsta síntesis simbólica, atornilla la búsqueda.
Juan Disante
Querida Amiga; Muy linda pintura hecha poema. Un trozo de cielo, un juego de niños y, después... la imaginación hecba dolor. Te abraza con cariño,
ResponderEliminarSUSANA,
ResponderEliminarACABAS DE DEMOSTRAR QUE DE LO SIMPLE PUEDE NACER UNA POESIA.
LUIS SIBURU
¡ Cuánta ternura, Su, ocho niños menos uno buscando la luz en la infancia de dolor. Todo mi cariño y admiración ante poema tan sensible. Virginia Carricaburu. Buenos Aires.
ResponderEliminarProfe siempre me sensibiliza tu forma de escribir y de hablarnos pero este poema habla tanto de vos que me quedo muy emocionada. Juli.
ResponderEliminarAdmiro tu finura para apaciguar el dolor. Fernando de Zárate
ResponderEliminarLo sensitivo brota del poema. Gracias Susana. María Elena Tolosa
ResponderEliminargracias a todos y a cada uno por su tiempò. a graciela, por su trabajo impecable e incansable. un abrazo en la palabra. susana zazzetti.
ResponderEliminarDentro del dolor que poetiza la autora hay una pátina de ternura.Hermoso Susana. El poema resume toda tu sensibilidad por hacer protagonistas a los más excluídos, y siempre desde la belleza poética. Felicitaciones.
ResponderEliminarMARITA RAGOZZA
gracias, marita, estás siempre en mi recuerdo con tu integridad tan humana. abracito. susana zazzetti.
ResponderEliminar¡Qué placer esta lectura! Tanta sensibilidad en lo simple. Juan R.
ResponderEliminarAdmiro profundamente tu manera de escribir poesía. Estos versos son de una luz definida, pura. Un manejo de la palabra que emociona, ubica, responde sin monosílabos en el alma. Un abrazo más que gigante.
ResponderEliminarMerci