LA MUÑECA
" Las bombas, desde el inicio de la agresión
el 8 de julio pasado, alcanzaron a nueve periodistas que daban cobertura en
Gaza".
" Gaza
queda tan lejos, o acaso tan cerca, que el dolor de una imagen es
potente.
Me
avergüenzo de nuestros niños, que están limpios , sus muñecas impecables , los
juguetes le sobran , tienen a papá y a mamá ,también hermanos , abuelos,
nunca caminan por calles en donde explotan bombas. Si tienen hambre comen, si
tienen sueño duermen en calentitas camas, papá o mamá , leyéndole el
cuento de todas las noches."
---Pero
Julían, en nuestro país, no es todo así---
Él
--corresponsal internacional del diario Perfil---no dejaba de hablarme.
Somos
colegas y tratamos de contarnos lo más relevante que vemos , en los lugares
adonde nos envían.
En un
momento del relato, Julían se puso a llorar. Le manifesté mi asombro, porque
ambos conocemos casi todo el Universo. Hemos estado juntos o separados,
en el centro de guerras civiles. En 1982 trabajamos en la guerra de Argentina
con Inglaterra, por las Islas Malvinas. Las imágenes que quedan en
nuestra retina, supera a las fotos que enviamos a los diarios . Las crónicas
que escribimos cuando en Chile lo matarón --padeciendo una guerra --- a
Salvador Allende y en una cancha a Victor Jara, le cortaron las manos y
asesinaron a Violeta Parra.
Lo dejé en
la puerta de su casa, tenía urgente que asistir a Casa de Gobierno, para la
conferencia de prensa que iba a dar la presidente Cristina Kichnner.
Llegué a
casa bastante agotado. Vivo solo. Hace cinco años que estoy viudo. No tuvimos
hijos .
Por mi
trabajo , he dejado sola a mi mujer largos periodos. Por suerte , ella
siempre me comprendió. Al no tener hambre , no cené.
Prendí la
televisión , me preparé un café doble, y al sentarme para pasar un rato de
distracción, el canal Crónica emitía una información URGENTE : "Una bomba
de extremo poder cayó en el principal hospital de Gaza."
Lo llamo a
mi amigo y él me transmite que lo estaba mirando.
Me pide por
favor que prenda la compu, porque me quiere enviar una foto. Hacía un día , la
había tomado en la calle principal de Gaza .
Veo a
una niña de cinco o seis años, con la cara y las manos muy sucias. Los
cabellos ausentes de higiene, abrazando y tapando los ojos a una mugrienta
muñeca con su manito izquierda regordeta.
El amor
hacia su nena, para que no viera las monstruocidades de los
hombres.
Apagué la
compu.
Cargué
la pipa, la encendí y pensé ¿ Los hombres de Israel o de Palestina ¡ no
tienen una muñeca ! que vea sus horrores?
impactante..duele....paracca
ResponderEliminarAbel: muchas situaciones, en el mundo, ponen vendas para que no se vean las muñecas. Mi saludo,
ResponderEliminarme adhiero a la opinion de Beatriz Chiesa
ResponderEliminarsaludos rita