Revista Literarte creada en Noviembre de 2001 para la difusión de todas las disciplinas del arte.Declarada de Interés Cultural por el Honorable Concejo Deliberante de Vicente López en Diciembre de 2002.
DECLARADA DE INTERÉS CULTURAL POR LA SECRETARÍA DE CULTURA DE LA PRESIDENCIA DE LA NACIÓN ARGENTINA SEGÚN RESOLUCIÓN 1706/10, en Junio de 2010
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DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN
Graciela Diana Pucci
Año 9
Número 32
Diciembre de 2009
Revista de Literatura y Arte
Partido de Vicente López
Buenos Aires-Argentina
Registro de la Propiedad Intelectual Nª 175844
Correo electrónico: revistaliterartedigital@gmail.com
Imagen de tapa
Obra: Aventura en bicicleta
Técnica: Acrílico sobre tela
Medidas: 120 cm x 0,80 cm
Autor: Silvia Ferraro
Argentina-1954-Buenos Aires-Martínez
Profesora Nacional de Pintura1979-Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón. Arte Terapista-Instituto Universitario de las Artes(IUNA)
Carrera/Cursos/Seminarios/Congresos Posgrado Pintura decorativa 2998/1999-Dirección de Cultura Minicipalidad de San Isidro.
Arte-Terapia 2000-Casa de la Cultura “Laura Alvim”, Río de Janeiro. Cromoterapia 2000-Río de Janeiro. Seminario de pintura con el Maestro Felipe Noé 2001-Buenos Aires. Carrera de Arte-Terapista en el Instituto Universitario Nacional de Arta IUNA 2001 al 2004. Seminario de pintura con el maestro Luis Felipe Noé 2004. Asistencia al Primer Congreso Internacional de Arteterapia en Argentina. Participante 2º Jornada de Arte Terapia Hospital Psicoasistencial Borda.
Ejercicio de la profesión: Profesora de plástica en Escucelas Provinciales-Distrito Bahía Blanca. Arteterapista en Clínica de Día “Girasoles” con pacientes con psicopatologías-San Isidro 2001/2002. Pasantía en el Hospital de Día del Hospital Psicoasistencial “José T. Borda” 2004.
Pasantía en Hogar de Niños “Querubines”, Olivos, Provincia de Buenos Aires 2004. Actualmente clases de dibujo, pintura e historia de arte en su taller.
Exposiciones colectivas e individuales: Salón Municipal de Cultura de Luján-1981. Casa de la Cultura Laura Alvin-Fío de Janeiro 2000.Museo Nacional de Arete Decorativo 2001/2002. Asociación Dante Alighieri 2003. Salón Humano I-2003. II Bienal Buenos Aires de Dimensión Centro de Arte-2003. Muestra Espacio Arte/03 “Bar Abierto”-Palermo Viejo. IIISalón Bienal “Ciudad de Beccar”-APLABE-2003.
Arte por la vida “Fundación María Cecilia”-Colegio de Abogados de San Isidro-2003. Dante Alighieri 2003. Galería de Arte Jakim
“Cable a tierra" es una construcción de cables de teléfono, sus medidas son 50x34x47. Patina cobre. Año 2009
Y lo acompañaba un texto que decía: “Todos buscamos en la vida el éxito la felicidad. Pero muy pocos encontramos aquello que nos sujeta a la tierra…porque a veces sin querer nos olvidamos de nosotros, ¡felicidades! Para quien en estos tiempos vive con los pies sobre la tierra.
En la actualidad, existen reglas en el mundo de la música popular que ya no sólo responden a una demanda de consumo - ya sea en función de una moda o ideología imperantes – sino que suponen una tozuda pretensión de querer igualar hacia abajo el nivel cultural de sus consumidores.
Son varias las aristas que conforman la crisis cultural que se abate sobre el mundo consumista de hoy. El sector joven, por ejemplo, ya se ve damnificado desde la edad escolar, y una de sus problemáticas, es la crisis de valores. Es un problema que azota al postmodernismo y que está emparentado, entre otras cosas, con la tendencia de querer sobresalir a cualquier precio en una sociedad donde no siempre se gratifica al que más lo merece. Esto lo absorben los niños, aprenden sus códigos, y se instala así un protagonismo que desplaza al mérito intelectual o profesional, donde la cultura exitista predominante premia a aquel que tiene mayores ingresos y bienes materiales y no siempre aquel que se formó en alguna especialidad. Ya no importa si el cavernario a bordo de su “cuatroporcuatro” enriqueció sus arcas de manera sospechosa, es todo un “winner” y va a ser un digno poseedor de lujosos palacetes y del harén más exclusivo. Un investigador, un docente, un científico o simplemente un trabajador, si no sube a ese tren de opulencia social, es un “looser”, un fracasado. Este nuevo “modelo” cuenta con mecanismos prebendistas en donde el mismo Estado es a veces un campo fértil para las sanguijuelas de ocasión que buscan ganar dinero en forma rápida y con el menor esfuerzo. El consumo de frivolidad y amarillismo mediáticos son también fieles fogoneros de estos paradigmas, e inflan un globo de flatulencia cultural de consecuencias lamentables.
A esta crisis de valores se llega, como es sabido, por la deficiente educación recibida en el hogar, producto de la desatención de los padres o de las crisis matrimoniales que desembocan en divorcios o abandonos. Muchos padres modernos, cuando ambos tienen que salir a ganarse el pan o cuando entran en esas competencias de status que les impone tanto el mercado como la sociedad misma, no hacen un debido seguimiento de la educación de sus hijos. Así nos posicionamos frente a una causal explosiva que amenaza al niño en plena etapa de formación.
Estos valores en crisis son algunos de los componentes del déficit cultural que se viene en caída libre sobre todo, en países con una historia complicada - como la nuestra - o bien, con una historia soslayada por el modernismo excesivo.
La música popular – portadora por excelencia de los quehaceres, pensamientos y emociones del público masivo – se hace eco de esta problemática cultural que viene agrietando cabezas desde hace años. Así, el gusto musical se vuelve precario debido al hipnótico consumo de canciones de pobre factura, poca calidad interpretativa y con mensajes que no dicen nada nuevo. Uno de los cánones vigentes en la música mediática sigue siendo el culto a la imagen, potenciado en la industria del video. Todavía hoy seguimos atravesando una era “óptico-dependiente”, una era en que los artistas deben poseer, además de un trabajo discográfico, una imagen agradable, coqueta o sensual impresa en alguna producción videográfica. Esto se torna una condición sine cuanon si el artista quiere que su producto tenga proyección comercial masiva.
Convengamos que en todas las épocas y ámbitos, los “productos” y bagatelas artísticas siempre han tenido su espacio; convengamos que la erudición, el buen gusto y la complejidad no siempre son rentables; convengamos también que la voluntad de las mayorías termina imponiéndose. Pero en este tiempo cada vez más “globalizado”, estas tendencias se vuelven más palpables por lo vertiginoso en que viaja la información, y nos volvemos testigos silenciosos de esta realidad.
Siempre hay quienes intentan establecer un equilibrio, y aún así, las bagatelas pueden imponerse. Pero el intento bien vale la pena. Si nos procuramos ser cultores de la diversidad, se debería reforzar la búsqueda de ese equilibrio que nos permite tener mayores opciones de consumo ya no sólo de la música popular, sino en cualquier rama del arte. La televisión por cable y Direct TV son algunas de estas opciones, aunque no tan democráticas y asequibles debido a los elevados costos que aun mantienen. Hay espacios donde se publican conciertos gratuitos al aire libre como las revistas culturales de barrio y fanzines, los programas de radio de corto alcance, la publicidad “de boca en boca”. Estas son algunas de las vías que le hacen contrapeso a ese monstruo llamado “música comercial” que, en otros tiempos, arrojó talentos que eran fieles a sus principios y que cuando se vendían, lo hacían con discreción. Hoy, esa discreción casi no existe.
Los que somos un poco más ilusos en estas cuestiones, no esperamos que un jazzista, tanguero o rockero tenga mayor salida laboral tocando piezas más elaboradas. Pero sí se espera que la música popular haga un poco de saneamiento artístico comenzando por el buen gusto y la calidad, responsabilidad compartida tanto para quienes hacen esta música como para quienes la escuchan. Sería esta, una clara señal de una mejora no sólo del nivel cultural, sino también de los valores de quienes consumen arte popular.
Es una noche de perros y tierra mojada que me empapa las narices, una noche de lluvia ensordecedora sobre el techo de chapa, noche fría que me congela el pensamiento en aquellos días lejanos. Escucho el viento, suena a violines apagados... será por eso que los pensares han venido a rescatarme; vienen ladrando sin bozal, algunos buenos y otros no tanto; qué no daría por saber qué o quién me los está trayendo en esta noche de lluvia y truenos oscuros, me lo pregunto en voz alta por si acaso la soledad me escucha... y abre una puerta... y entre una bocanada de cielo limpio. La lluvia, el viento, el frío o quizás los duendes de la noche me estén jugando una buena pasada... solo la ventana que me sostiene y esta noche de perros sueltos conocen la respuesta, pero ya estoy lejos y no podría escucharlos, aunque quisiera, desde mis días lejanos...
De quienes fuimos engendrados.
De las aguas bautismales;
de las costumbres, mitos y rituales.
De las cosas que son sólo cosas.
De quienes se alejaron.
De lo que sentimos
y de lo que no sentimos.
De lo que no pudimos ser
y de lo que nunca seremos.
De lo que otros inventaron
para atormentarnos.
De los prejuicios, de las modas
y de las urgencias por vivir.
De la promesa dada en el altar.
De las rutinas que esconden abismos.
Del papel escrito, mal o bien, pero escrito.
De quiénes, de qué
De quienes así nos hicieron.
De los principios que nos protegen.
De la aureola que ya nada sostiene.
Del último cielo que esperamos nos espere.
Y todo esto
para no asumir
que somos cautivos
de nosotros mismos.
Del libro de poemas: SILENCIOS ENCENDIDOS. Mis Escritos, 2008
Escarba sus dientes para limpiar los restos de la estrella que acaba de cenar. No pudo terminar la sopa de cielo. Se irá a dormir sin comer postre ni ducharse. Mañana será otro día; tendrá que salir bien temprano a encontrar trabajo, antes que Dios lo condene devolviéndolo a la vida.
El nuevo ritmo del son suena espeluznante; metamorfosis armónica de viejos compases claudicados por tanta descompresión. La sonoridad del ritmo ha sido históricamente huella de los vientos y aludes, pero no así de los volcanes: tan distinguidos señores y sones provocaban eternas vibraciones en aquéllas épocas de primeros habitantes donde algunos eran sordos, esos... los del camino sinuoso de miserias y espantos, aquéllos... que sólo escuchaban su voz interior y no la de los demás. Pero la música viaja: la llevan los nacimientos de risas nuevas, las plumas en su viaje holístico y los mares en sus recorridos alrededor del mundo. Mientras, ellos siguen esperando al indeseado volcán de los pisos que se mueven y provocan fracturas. La música viaja porque es música; así ella, dueña del ritmo y todos los sones, también es reina de los silbidos para aquéllos que escuchan y no son sordos.
Los dos hicimos un pacto: él no me come yo no interrumpo sus sueños
Pero, a veces, temo quedarme sin voz y transformarme en otro animal que yace en una línea irregular una, no dos, una que sueña paisajes regulados por la luz.
El bicho bolita es el típico espécimen del repliegue metafísico... En su primera instancia de vida redondita, inicia el ciclo haciéndose el indiferente con respecto a los demás animales de la fauna mitológica, porque este bicho - válgase mejor llamarlo arrabalero -, agarra para sí mismo los dolores de todo Buenos Aires, de París, de Budapest y por qué no de Aldosivi ya es un poco de todos lados aunque se parezca a un acorazado ruso y se le piante andar solo; no como las hormigas peronistas y montoneras... el bicho sartreano gusta de quejarse solo. Se podría decir entonces, que es un artista indiferente al proletariado aunque tampoco sea un aristócrata. Por lo general, cuando deja de estar taciturno se rodea de lombrices o críticos literarios de entrecasa y eso, al agraciado y pintoresco filósofo, le agrada muy poco; sólo cuando le convidan tierra y humedad de piedra en los bares caracoleros que sirven, algo así como un vodka o una cerveza artesanal que preparan las hormigas descarriadas que no quieren ser jornaleras y prefieren dedicarse a disimularse como hormigas voladoras. Para eso se consiguen pedacitos de alas de mariposa y a éstas las llaman raronas. Pero el bichae bolitae, que de romano andá a saber si tiene algo, prefiere la soledad, la poesía y la bohemia vagando por barrios peligrosos a la medianoche, preguntándose si existe un paraíso o si el encuentro con el otro es posible o cómo lograr que la bicha bolita no lo deje hablando solito sobre la estética o que, cuando le pregunte qué hay de comer, no se cierre sobre sí misma ni en el baño porque se quedó viendo la novela. Un dato muy importante es que los bichos son muy religiosos y le hacen santuarios a Gregorio Samsa. También llenan de estampitas los escarabajos que manejan cuando van escuchando “The Beatles”, sin prestar mucha atención al tráfico. El doctor Svegrali afirma que son seres muy patológicos y los considera autistas; el facultativo dice esto porque es un piojo resucitado. Téngase en cuenta que todos estos sujetos filosóficos son una minoría en el enorme y vasto jardín del universo, pero como dicen no solamente si de brujas están chusmeando: “que los hay, los hay...”.
A mediodía los obreros y los jubilados arrasaban con el menú fijo en el ya derruido barsucho donde él hacía de mozo. Yo iba con frecuencia por mi trabajo, para rellenar planillas, y leer el diario. Ahora es el repartidor de una tintorería. Ayer, casi de noche, fue a mi departamento en misión repartidora. A mi regreso, hoy, después de una gira que me mantuvo alejado por esos caminos polvorientos, me cuenta mi señora, esa falsa e indómita pelirroja suculenta y estéril, que me extrañaba terriblemente, y que el jovencito irrumpió en su anhelo de mí con nuestra colcha lila, y que lo condujo al dormitorio para constatar sobre nuestra cama con baldaquín la correcta limpieza de la colcha, y que una vez situado el pichón de playboy, y asaltado, se entregó a la bacanal que desde mi señora, mi esposa, me estuviera —irremediable, inconteniblemente— dedicada. Se portó bien, muy bien, aseguró; fantasioso e incansable; remató, relajada: excelente.
Sé absorber los más impresionantes uppercuts del destino. Pocos, sí, pocos como yo. Este servidor. Estoy hecho de una extraña pasta.
La muerte disparó su oscuro brillo con el sonido agudo de la escopeta calibre 12 grande; habiéndose alejado de la laguna un rato antes, el pato negro se había acercado al casco de la estancia en busca de paz y comida, y ahora sus alas despavoridas levantaron el vuelo herido, rozando la tranquera, intentando su último escape; pero el frío púrpura de la tarde lo tumbó sin piedad y el cielo se abrió como un llanto blanco. Desde la laguna, otros patos volaron anticipando su largo viaje. La antigua y cobarde temporada de "humanos", otra vez, había comenzado...
Una carta que no es carta, debería ser algo así sin márgenes sólo una exposición un cosmos de ideas un irse y un dejarse soltar el puerto callarlo todo en los entredichos porque las formas, ay las formas también dicen insinuar un roce, dibujar un labio cruzar la pierna abrir una puerta, desprenderse de sí mismo estar en otras partes con una ceja, un párpado, la mano viajando fuera de uno mismo llegando a múltiples lados basta de rutinas porque es el trabajo de los perezosos dice Henry Miller abrir el ojo la distracción también es sintonía porque los grillos, los grillos con sus cantos dibujan dibujan estrellas de fuego en el agua Y vos estas viniendo cruzando el puente abriendo y llegando desde las ansias a plantarte de lleno a situar el orden y luego romperlo quebrarlo en su eje e inventarlo todo de nuevo uniendo las venas del universo en una armonía inusitada y estas llegando y yo estoy tan del otro lado...
Francisco estaba cargado. Su arma, también. Sabía cómo lo haría: rápido y a quemarropa. Finalmente, le dispararía a su hermano... Francisco se quedó quieto, agazapado en la sombra de un pino del jardín delantero de su casa; sólo una esquina separaba a los hermanos. Veinte baldosas después, Francisco apretó dos veces el gatillo de plástico de su pistola de agua.
El nombre Keanu es originario de Hawái, isla de la que proviene su padre y significa «brisa fresca sobre las colinas». Se crió en Canadá, era excelente para el hockey sobre hielo, lo cual le ganó el apodo de «El muro».
Debutó en el cine en la película “Youngblood” (1986) donde interpretó al arquero del equipo de hockey.
Posee una Estrella de la Fama en el Boulevard de Hollywood y el Premio Taurus Stunt Movie Awards por su actuación en películas de riesgo.
Mi primer acercamiento con este actor fue con la película “El Abogado del Diablo”, la encontré interesante, es una de las pocas que trabaja el flashforward, es decir el personaje se adelanta en el futuro.
Decidí investigarlo, por ello vi completa la “Saga Matrix”, “Constantine” y “El Día que la Tierra se Detuvo”. Me encontré frente a un actor encasillado, sus roles siempre eran algo así como un Mesías o un Elegido o él era la única Fuerza capaz de salvar el planeta. El viejo enfrentamiento entre el bien y el mal con el Salvador correspondiente.
Vamos por partes:
En “El Abogado del Diablo” 1977, Kevin Lomax, es un joven abogado exitoso cuya carrera no ha tenido un solo juicio perdido. El descubre tardíamente, pues a esa altura su vida familiar se ha destruido, que es el hijo del Demonio, quienespera, a partir de él, crear una nueva raza. En esta película, la verdad, la actuación sobresaliente se la lleva Al Pacino. Keanu Reeves le sigue el paso; su trama muestra que en la permanente lucha entre el bien y el mal el hombre toma sus propias decisiones y actúa contra sus principios por su gran amor a “el mismo”. Una vez que toma conciencia y regresa a sus valores, le corresponde salvar al mundo de esta red de mal, muriendo en este proceso. Cuando actúa algunas escenas, pone un rostro muy particular entre impávido e imperturbable, lo cual le hace parecer ausente.
La “Saga Matrix”, está constituida por: “Matrix”1999, “Matrix Reloaded” 2003 y “Matrix Revolutions”2003, películas caracterizadas por una cantidad impresionante de novedosos efectos especiales, el uso de la tecnología digital, buenas actuaciones y una estética ad hoc que ha sido copiada hasta el cansancio, constituyéndose en un referente.
Aquí lo encontramos como el Elegido de los humanos libres o no esclavizados por la Matrix. Su personaje, Neo en la realidad, Thomas Anderson en la Matrix; se va perfilando desde un joven inconsciente de sus poderes y luego como una persona madura que enfrenta el desafío al cual está llamado.
Estas películas tienen argumentossencillos y predecibles, en ellos hay una mezcla de filosofías y religiones, en lascuales la fe y la esperanza son el elemento que hila cohesiona el conjunto frente a la realidad que plantea “que aquello que ven como realidad es sólo una virtualidad creada por las máquinas que gobiernan el planeta”.
No sabemos si Neo, quien ha mantenido durante gran parte de las películas su rostro inmutable y ausente, sobrevive; lo cual deja una puerta para retomar la serie en un futuro, lo que para mi gusto sería un exceso.
La importancia de los efectos especiales es concluyente: son espectaculares. Matrix, como saga, en cuanto a ellos marca un antes y un después.
En “Constantine” 2005, John Constantine, tiene el poder para ver a los ángeles y demonios que conviven con nosotros en la tierra, es un héroe exorcista. Lucha para enviar de regreso al infierno a los demonios que encuentra a su paso; tratando con esto de redimirse y salvar su alma, pues trató de suicidarse a los 12 años y eso lo ha condenado al infierno. Es un hombre sobre el cual recae el peso de la salvación del planeta y de paso la suya propia, tiene cáncer a los pulmones y los días contados.
El ambiente de la película posee semejanzas con la estética de Matrix, austeridad, mobiliario minimalista, ropas idénticas que usa durante casi todo el tiempo, gentes solitarias e incomprendidas en trabajos especializados, una vez más el rostro neutro, el hombre solo y cínico frente a su destino. Los efectos especiales son conocidos y casi todos ya se han visto en Matrix, aún así constituyen su fortaleza y diría que sostienen esta película. Ha sido el gran fracaso en las películas en que él es protagonista, desde el punto de vista de taquilla y de crítica.
“El Día que la Tierra se Detuvo”, 2008 es una versión actualizada de la película del mismo nombre filmada el año 1951, la versión original recibió premios en los años 1952, 1995 y 2000. La cinta forma parte del Registro Fílmico de USA por su significancia cultural ehistórica. Es la quinta mejor película americana de ciencia ficción de todos los tiempos en el listado del American Film Institute.
Se ambienta en los tiempos de la guerra fría y el peligro inminente de armas más poderosas que la bomba atómica, también plantea un discurso final acerca de la paz.
Bajo este alto piso se reconstruye la trama original, poniendo el énfasis en el Calentamiento Global y la Ecología y se eliminan los discursos que el espectador actual no está dispuesto a tolerar. Trata de Klaatu, un alienígena antropomorfo que llega a la Tierra a prevenir a la población sobre la forma en que está devastando el planeta.
Al no ser oído, concluye que la raza humana es la especie depredadora por excelencia y decide exterminarla con la ayuda de un robot gigantesco Gort, (GORT: Tecnología Robótica Genéticamente Organizada) poderoso e incontenible.
Sin embargo, en el último minuto, personas que ha conocido en la tierra le hacen sopesar su decisión. Klaatu, al final brinda otra oportunidad a los seres humanos.
La película es kitsch, con un toque de norteamericanismo digno de “El Día de la Independencia”. Los efectosespeciales presentan algunas novedades, la mayoría ya se han visto en Matrix.
Esta versiónfue nominada como Mejor Efectos Visuales y Mejor Sonido en 2008 en los Satélite Awards.
Resumiendo todo lo visto hasta ahora: la actuación es buena; la taquilla ha sido, con una excepción, alta; la critica francamente dispar; Keanu Reeves se ha cimentado una sólida y merecida situación económica, sin lugar a dudas sus trabajos son entretenidos y afines al género del Terror y la Ciencia Ficción.
La pregunta es si el actor tiene la capacidad de manejarse en roles diferentes con otro tipo de exigencias. En los roles descritos, queda la sensación que es el mismo personaje re-interpretándose una y otra vez.
Esto lo veremos en la segunda parte de este artículo.
Recomendación: “The Private Lives of Pippa Lee”, que aparecerá pronto en cartelera.
