miércoles, 17 de febrero de 2010

Abel Espil-Buenos Aires, Argentina/Febrero de 2010






UNQUILLO

LLEGASTE ANTES, PERO MUCHO ANTES QUE CARLOS. ÉL FUE EL QUE TE CONOCIÓ Y HABLÓ DE TUS MANOS. NO ERAS UN HOMBRE ATRACTIVO. TU NOMBRE TENÍA ORIGEN ITALIANO. TUS MANOS - CUANDO ALONSO TE CONOCIÓ - ATRAÍAN LA MIRADA POR SU TAMAÑO, LOS DEDOS GORDOS Y LAS UÑAS AL BORDE.
ALONSO CONTABA EN EL CAFÉ DE GARCÍA, QUE CUANDO TUS MANOS, SOBRE TODO LA DERECHA, APRETABAN EL POMO DEL OLEO, AQUELLO ERA UNA CARICIA: DESENROSCABAS LA TAPA MUY LENTAMENTE, Y ALLÁ VOLABAN LOS COLORES.EL AMARILLO SE REÍA DEL AZUL, EL ROJO SACABA PECHO FRENTE AL VERDE, PERO TUS MANOS POR ÚLTIMO Y POR LARGO RATO  TOMABAN EL NEGRO.
EL NEGRO, PARA VOS - LINO ENEAS - SE CONVERTÍA EN UN ARCO IRIS. NO ACEPTABA DISFRACES NI ENGAÑOS.
ALONSO DECÍA QUE AL TIEMPO TE FUISTE A TRABAJAR Y VIVIR A EUROPA.
TE ACOMPAÑÓ ANTONIO. TE SIGUIÓ URRUCHÚA. Y ALONSO, QUE TE SEGUÍA, SE FUE.
AL TIEMPO LARGO REGRESASTE. QUINQUELA CON CÓRDOBA Y JORGE LUIS, LLEVADOS POR XUL SOLAR, TE FUERON A BUSCAR AL  PUERTO. YA NO ERAS EL MISMO LINO ENEAS. YA ESTABAS ENCORBADO, MUCHO MÁS GORDO, Y TUS MANOS TENÍAN SANGRE...PERDÓN, CHORREABAN SANGRE.
LA CASITA DE UNQUILLO TE GUSTÓ. PERO MÁS EL ALMACÉN DE DON RADIO QUE ESTABA A DOS CUADRAS. LE DEJABAS UNA OBRA CHICA Y TE LLEVABAS UNA DAMAJUANA, LE DEJABAS UNA OBRA GRANDE Y TE LLEVABAS DOS DAMAJUANAS.
ALONSO, SALÍA DE SU CASA- VARIAS VECES LO HIZO - A DAR UNA PEQUEÑA VUELTA  PARA CONOCER EL CIELO DE UNQUILLO Y VEÍA LUZ EN TUTALLER. ENTRABA, Y LO QUE RELATABA FUE UNA Y VARIAS VECES LO MISMO: SPILINBERGO SENTADO EN CATRE CHICO, BAJO; LAS MANOS VENDADAS, HINCHADAS, HERIDAS, DOLORIDAS, Y EL LIENZO MIRÁNDOLO MORIR

14 comentarios:

  1. Muy buen cuento y original la forma de escribirlo (a veces en minúscula y otras con mayúscula). Un sentido homenaje al pintor y al hombre que nos dejò tanta belleza.Felicitaciones, te mando un beso, Alicia Cora

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  2. ME GUSTÓ MUCHISIMO EL RELATO.!QUÉ BUENO MENCIONAR A ESOS ARTISTAS NUESTROS, FABULOSOS.IMPECABLE Y ORIGINAL.
    DE TERROR LA UTILIZACIÓN DE LA ORTOGRAFÍA.NO PUEDO CREER QUE EL AUTOR SEA QUIEN HA COMETIDO LAS BARBARIDADES DE APELLIDOS CON MINÚSCULA, DE CORTES EN EL TEXTO EN LOS LUGARES DONDE AQUÍ ESTÁN CORTADOS, ETC. Y TAMPOCO ME IMAGINO QUE ALGUIEN QUE TRANSCRIBE PARA UNA REVISTA LITERARIA, TENGA ESAS FALENCIAS. OJALA USTEDES PUEDAN VOLVER A TRANSCRIBIRLO COMO DEBE SER, PARA QUE SUS LECTORES PODAMOS APRECIARLO SIN QUE NOS DISTRAIGAN ESOS INEXPLICABLES ERRORES.

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  3. Un relato cálido y sentido, que evoca la figura de aquel notable artista plástico, a través de su principal herramiento creativa: sus manos. Abel, sin dudas un autor con notable sensibilidad literaria.

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  4. A la Sra. Élida Milanesio, con el mayor de mis respetos y como editora de Revista Literarte, le digo que en la redacción se respeta el texto tal y como lo envía el autor, y si éste decide usar minúsculas como licencia literaria, eso debe ser respetado, de todas formas agradezco su apreciación y la saludo cordialmente
    Graciela Diana Pucci
    Editora

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  5. Abel , es incrible tu imaginacion , a pesar de todo . Me parece genial que escribas , Es algo que a mi me gustaria , pero no puedo . Muy emotivo y raro a la vez Me legro de haberlo leido un beso Lia

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  6. Muy buen relato Abel,muy sensible descripción, respeto la forma de escribir con minúsculas y puntuaciones poco ortodoxas,pero coincido con Élida que nos distrae la atencion y no permite apreciar la lectura en sí misma.
    Felicitaciones y vamos por más.
    Norma

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  7. Me gustó tu escrito, en su forma y en su contenido. Parte de un hombre con historia bien vivida, con temperamento y lucidez, que no desperdició ni un minuto de su vida ardiente y acompañada.Bien acompañada.
    Me gustaste. NÉLIDA BEATRIZ HUALDE

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  8. al fin, alguien mas y externo le puso un limite "metaforicamente" a la Sra. Milanesio, la cual expuso un monologo y una vez mas de critica y por supuesto juicios sobre...la manera de redaccion tambien de un escritor.Gracias Sra. Pucci, en su comentario y siendo quien es en su puesto de la Revista.abel, es un escritor por doquier...desde niño segun hasta donde supe y con el correr de los años...pues he guardado muchos escritos, poemas, cuentos, pequeñeses que suelen ser las grandes en servilletas de cafes, hojas sueltas, infinidad de estos.mas èl no me cree a veces en mis meras apreciaciones de los mismos, estima que no soy objetiva.yo tambien escribo hace muchos años, en libros y cuadernos, al igual que el amor por cuando de salud estoy bien haber tenido siempre esa habidez de lectura.Mas uno se pierde entre ellos al igual que su puño tras un boligrafo y papel.Abel es de una profundidad en algunos textos que siempre le digo; que requieren de mucha reflexion y relecturas, es de extrema sensibilidad y mente vuela a aquellos reconditos lugares donde por instantes parece que uno no puede llegar y aun asi, la maravilla de su vuelo, hace ya bella su lectura.
    "Hay artistas que se han perdido a si mismos, por un deredor unico avbsorvente y permitido por el amor loco del artista hacia ese ser" y "Otros, sabran, se han perdido por su propia autodestruccion"
    Te sigo esperando y necesitando, una de tus hijas.

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  9. papa, te olvidaste de nuevo..., UNQUILLO, me lo hiciste leer y mostrar ni bien lo escribiste.se que nunca recorbas nuestras cosas, amigas, en fin...sabes que te quiero y soy tan peremne a los detalles de cariño.y UNQUILLO Me lo habias dedicado a mi en un mail privado, lo recuerdas???
    me puso triste ahora...
    AUN ESTOY VIVA...

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  10. Me ha gustado muchisimo su cuento.Muy emotivo, ocurrente, vivaz y sensible.
    Lei, ademas todos los comentarios y coincido en cuanto al irrespetuoso comentario de una señora con relacion a su manera o forma de redaccion.Han existido en letras, escritores que hasta han invencionado palabras.Lo felicito.Mercedes.

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  11. PALOMA CLAUDE(nombre de pila)dijo:

    Tu cuento es divino, hace honor a gente valiosa para recordar, me encanto.
    Y me parecio, como escritor, filosofo, antropologo y psicoanalista, de una notoriedad sublime el comentario de; "Una de tus hijas" asi se manifesto ella. Me gustaria conocerlos a los dos, sucede que no puedo dejar ningun dato personal por razones ovbias (soy reconocido)y de noche en noche como muchos de nosotros y mas ahora que estoy terminando un libro, suelo recrearme en estas revistas, solo las que son de mi interes y con grado de mi atencion.
    Dado tu cuento, que te digo es brillante.Se me ocurre quizas que es probable por tus conocimientos de pintores y sino fijate de investigarlo, el oscar que gano sino me falla la memoria(estoy algo mayor) por 1997 Anthony Hopkins junto a Natasha McElbone sobre el artista de la pelicula: "Sobreviviendo a Picasso", es una genialidad, porque trata justo se ve lo que deja entre ver esta hija tuya.Y segui escribiendo asi rompas hojas y hojas, segui, avanti!!!

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  12. Revisando mis mail informo : en función de aclaración y respeto, a mis lectores ,a la directora de la revista Graciela Diana Pucci y a los comentarios escritos lo siguiente. Ha sido envíado el 16 de Enero del 2010 en totalidad con letra mayúscula el cuento llamado Unquillo.
    Abel Espil

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  13. con las disculpas del caso, he vuelto a subir el texto del escritor Abel Espil, tal y como él me lo había enviado, por motivos inherentes a la redacción, el mismo fue pasado a minúscula y allí ocurrieron los errores que yo defendí en su momento pues no había visto el texto en su original.
    Gracias a todos los que han dejado su comentario y mis respetos a la Sra. Élida Milanesio quien fue la que hizo notar el error que yo tan fervientemente defendí.

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  14. Abel, has logrado en pocas líneas describir un lugar de Unquillo en el que se han dado cita dos grandes maestros de la pintura: Eneas Spilimbergo y Carlos Alonso. En la humilde casa donde vivía el viejo pintor se percibe ese clima de opresión y soledad y al mismo tiempo de creatividad silenciosa y dolorida. También la admiración del joven Alonso por su maestro. Finalmente te comento que en Unquillo vive otro gran pintor, Álvaro Izurieta, dibujante, retratista, paisajista extraordinario que merecería ser más conocido y reconocido.

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