PACTO
¿Por qué no vuelve
a tus ojos profundos y agrandados
el fulgor
del arrebato del amor y
a la hilera de tus dientes
no retornas las alegrías de tus labios?
¡Si de tu cuerpo emanara de nuevo
el halo del ave en plena caza
sabiduría que ondula,
ritmo frenético
nacido en tus entrañas!
Ah
Si volvieras a ser la diosa del Olimpo
retornaras a ser feliz,
mujer,
dejaras atrás la voz monótona
abandonaras
ese decir entristecido,
mis brazos te cobijarían
aunque no te permitieras
pactar con la felicidad.
Te aguardo.
Admiro tu multiplicidad, tus escritos sensibles que nunca olvidan la condición humana. Un abrazo, querida amiga,
ResponderEliminarAndrés
Hola Sonia, agradezco muy sinceramente tu comentario para "nuestra" Emma. Tu expresión de "noia" al referirte a mi, me trasladó a tiempos remotos. Hoy cuando en los primeros días de enero me esperan los 84 soy una anciana pero que todavía se atrve a bailar sardanas. Felicitaciones por tu "Pacto" Encierra un amor esquivo. Trinidad.
ResponderEliminar¿Será el instante del amor, la esperada felicidad, amiga? Será finalmente el hombre o la mujer, quienes conciliarán la vida con la persona. No sé.
ResponderEliminarFelicitaciones
¿Y es que acaso se puede volver a amar?
ResponderEliminarEs muy bello. Y triste, como casi todo lo bello
Florencia Tropeano
Trinidad, Graciela María, Andrés...
ResponderEliminarGracias por dejar un comentario a estos versos que escribí sí, pensando que se puede volver a amar aunque no sea éste mi caso. No sé si la edad, los años de amor intensos con el mismo hombre... quizás otro momento...otro espacio...una locura. Pero el amor está presente en cada gesto de un hombre a una mujer o viceversa. Volver a amar debe ser algo maravilloso y mágico. ¿Acaso no es magia el amor? Mil gracias. Sonia