TODA LA
ETERNIDAD
Hola ¿cómo te
va?
–Bien, respondo-
¿Bien, y esa
cara de muerto que tenés?-
-Y a lo mejor
estoy muerto—
¿Cómo vas a estar muerto si estás aquí y
hablándome?
No bromees con
eso-
-Ah, pero puede
ser que esté muerto y esté en el más allá y vos en el más acá, ¿Quién sabe?-
No te hagas el
difícil, ¿Más acá, es el más allá? Si los dos estuviéramos muertos no
estaríamos hablando—
-Ah, ¿sí? Y cómo sabés que estás vivo? Porque conversemos, no quiere decir que
estemos vivos, ya que no sabés lo que es estar muerto, o sea que hablás de algo
que ignorás completamente y no tenés ninguna experiencia.
-Me estás
complicando la vida con tus respuestas-
-¿La vida o la
muerte, te complico? ¿Ves que no sabés?-
-Pucha ¿qué te
sucede hoy? Mirá, voy a cambiar la
expresión y la pregunta, ¿Cómo te va, estás raro hoy? Listo.
-Si estoy muerto
no tiene nada de raro. Los muertos estamos así, y no sé en qué forma me ves, yo
te veo igual a mí.-
¡Epaaa ! Me vas
a convencer que yo también estoy muerto, me pellizco y me duele,
por lo tanto,
vivo-
-Eso es una
sensación, un reflejo, un recuerdo, no quiere decir nada en absoluto-.
Mirá, estás muy
loco, y no te voy a creer nada de todo lo que decís.
-No me creas,
que me importa, pero es un hecho.
Bueno, no te
banco más , me voy, ¡¡¡chau!!.
-¿Y adónde vas a
ir ? No hay dónde ir, es todo lo mismo
aquí, probá de salir.-
Sí, me voy, y
rápidamente.¡Oia!¿Dónde está la puerta de salida? ¿Cómo no la encuentro?- Está
todo oscuro, pero te veo a vos. ¿Cómo es eso?-
-No me ves a mí,
es sólo mi alma o lo que sea… puede ser mi espíritu.-
¡No entiendo
nada de todo esto !
-Lo que pasa, es
que vos recién llegás amigo, ya te vas a acostumbrar, tenés toda la eternidad...
Me resulta bien, amiga. de mucho gusto.
ResponderEliminarBeso
José Valle Valdés
ResponderEliminarTu eres libre,
porque escribes
con toda tu alma
también el corazón,
y cuando dibujas las letras,
te vibran la entrañas
por la pasión que pones,
en la liberación de tus sentires.
Llevas adentro las ansias
de mostrarle al mundo
que eres emancipado.
A pesar de las cadenas…
Nada ata tu mente,
tu espíritu vuela…!
Héctor Labonia 23/08/13
Amigo Labonia: Me encantó el relato y el tema. Muy bién narrado en diálogo coloquial y casual, que es muy dificil de manejar. Y ¡Oh sorpresa! Mo doy cuenta que somos vecinos de Miramar. Yo también escribo en la revista y también,a veces, sin dramatizar, sobre la vida y la muerte. Lo felicito. Marcos Polero.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuchas gracias, Marcos-
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