lunes, 16 de diciembre de 2013

Sergio Garrido Jorquera-Chile/Diciembre de 2013



NACISTE SIN SABER ¿POR QUÉ? (Oficios)
  
Naciste sin saber ¿por qué? Quién mejor que tú, para ayudar a los cansados conductores a cumplir con sus horarios.
Ellos, apenas te ven, reciben tus mágicas señas indicando la distancia que los separa de correr o de volar. Muchos te observamos anotando, corriendo, informando y mirando, para
volver a anotar y seguir corriendo.
No te asusta nada, ni el correr, ni el acercarte, ni bajarte y seguir observando y anotando.
Las horas corren, tú sigues volando a cada momento que pasa.
Te veo en el mismo lugar, sin cansancio y con tu voz y señas, siempre alertas, ordenas el tiempo de todos los buses. ¡Qué importante eres y con qué sencillez te miramos! No sabemos, cuando naciste, ni por qué. Sólo sabemos que estás ahí y con tu permiso y lenguaje propio, das lo mejor de lo que haces, permitiendo que cada viaje se cumpla a tiempo. Naciste sin saber ¿por qué?, pero ya eres parte importante de nuestros días. Señor sapo.
(Grupo Literario LiteRatis)

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