Estación de llegada
Voy camino lentamente a mi estación de llegada.
Buscando en cada parada algún rostro conocido,
Los que perdí en mi camino y se han vuelto inolvidables,
Mas solo encuentro sus voces que resisten el olvido,
Esas cosas del destino que me dejan asombrada.
Los que han sido ayer ya no existen más allá de los recuerdos y creo que están descansando, Tal vez se me han escondido
Tras las montañas de piedras que cruzo por el sendero.,
Será que Dios no me escucha porque se quedó dormido y quisiera
Despertarlos, para volver a abrazarlos.
Veo guigarros , pastizales, por donde habitan otras sombras
Que pretenden asustarme, pero yo, que fui criada sin miedo, no doy cabida,
Y sin embargo me inquietan volviendoseme espectrales.
Sí hoy el susto se me asoma, con ese temor que exonero,
Tengo miedo mas lo escondo, en el ruedo de mi pollera,
Esta inquietud no la quiero y a la duda, la pateo, si solo quiero arribar
A m mi última parada.
Prefiero que entren en huelga cada uno de mis miedos.
si siempre supe enfrentarlos en cada momento aciago,
¿Qué extraña maledicencia hoy pretende despertarlos? Si fueron indispensables en cada uno de mis pasos. No permito se conviertan, en ángeles desgreñados.
Arranca el tren que me lleva a la estación de llegada y en el vagón de mi suerte llevo colgando mis años.
Excelente creación poética,nos hace reflexionar y añorar los seres queridos que ya no están físicamente,pero que quedan escondidos en nuestros corazones.
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