Mi niña mujer
Me miré en tus ojos y aún dormías...
me miré en lo profundo de tu alma pura.
Me miré en tus manos que sentí tan mías,
te miré... y murieron mis penas oscuras.
Me miré en tu ojos que cerraban el sueño
porque, aún cerrados, ven más que los míos.
Me miré en tus alas que no tienen dueño
y mis días de invierno ya no fueron fríos.
Tu niñez se escapa de tus manos blancas
pero la inocencia aún no te abandona.
Por eso tus pupilas que aún están cerradas
no permiten ver lo que las mías no logran.
Te miré en silencio, te miré dormida...
te vi convertirte de niña en mujer.
Tan solo con verte me alegras la vida
y me enciendes el cielo... mi María José.
Participó en el concurso “Adelante siempre”, organizado por Aventuras de Papel, sede Ecuador.
Me miré en tus ojos y aún dormías...
me miré en lo profundo de tu alma pura.
Me miré en tus manos que sentí tan mías,
te miré... y murieron mis penas oscuras.
Me miré en tu ojos que cerraban el sueño
porque, aún cerrados, ven más que los míos.
Me miré en tus alas que no tienen dueño
y mis días de invierno ya no fueron fríos.
Tu niñez se escapa de tus manos blancas
pero la inocencia aún no te abandona.
Por eso tus pupilas que aún están cerradas
no permiten ver lo que las mías no logran.
Te miré en silencio, te miré dormida...
te vi convertirte de niña en mujer.
Tan solo con verte me alegras la vida
y me enciendes el cielo... mi María José.
Participó en el concurso “Adelante siempre”, organizado por Aventuras de Papel, sede Ecuador.
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