En el desván
Me faltó tu calor,
Busqué otro abrigo.
Me ví en la oscuridad
Y encendí todas las luces de mi casa.
Me molestó el silencio
Y puse al máximo volumen la música del alma.
Y ya no sentí frío.
Y la luz me alumbró
Con mil focos distintos de colores.
Ya puedo oír la música
Bien fuerte dentro mío.
Hoy tengo todo en orden.
Pero no pude
Encontrar el lugar
Para poner afuera la ternura
Que ví que me sobraba.
Y como no hallé el sitio,
Junto a las cosas viejas
En el desván del tiempo y el olvido
La dejé abandonada…
Allí la cubre el polvo.
Y le tejen puntillas las arañas.
Muy lindo poema Martha!!!!
ResponderEliminarbesosss Josefina Fidalgo
Martha,
ResponderEliminarNo pensé nunca que en el desván podría llegar a encontrar versos tan sensibles. Muy bueno.
Luis Tulio Siburu
¡Martussss qué lindo! ¡Qué placer!
ResponderEliminar¡Qué desván! Besotes, Olgui.