Victoria Asís-Magdalena, Provincia de Buenos Aires, Argentina/Febrero de 2013

Poemas otoñales
　
Poema 1
　
Voy a mantenerme en tus sueños. . . Para que aprendas.

Que no hay sonido que no te traiga el rumor

de mi risa, no cuando estás aquí.

Que no hay fragancia, que no te recuerde
el olor a mi piel.
Cada textura, cada lisura, cada contorno
de cuanto acaricies sabrá a mi,
y desearás tocarme, para sentirte vivo.
Voy a mantenerte conmigo. . . Y no olvides,
la suavidad de mis dedos, recorriéndote,
estremeciéndote.
y en este otoño de silencios, de ocres
y dorados ponientes querrás verte en mis ojos,
donde anidan travesuras y cómplices ternuras . . .

Poema 2
　
A poco de verlo, descubro su presencia
esa blanca camisa me enamora,
me abstrae de la desgana matutina
sus ojos pletóricos de luz
producen ese nútrico embeleso, dejando
de lado la inercia del momento.
Su voz siembra sobre mi piel desnuda
una suerte de abono perfumado
que llega para quedarse en mí
para engendrar a la criatura que nos junta
y darnos la figura del poema.
Comparto travesuras con su mente que relaja
mi cuerpo y lo transforma, en esa dama de noche
que sueña con sus manos y su boca
arropándome de ternuras transparentes, quemándome

desde allá con sus caricias. . .