viernes, 21 de junio de 2019

Juan Olegarío Mansilla-Argentina/Junio de 2019


QUERIDO ALBERTO
Trovador y Poeta,
Cantor, Juglar y Profeta.
Caminante incansable de tantos caminos,
y siempre volviste
a tu “Rancul” querido.
Tu canto y poesía,
seguirán perdurando,
“En un rincón del Alma”
y en “El abuelo” gringo,
de estirpe española,
que irá tras el “Callejero”,
que buscará la sombra
del árbol crecido,
que plantaste un día.
Y siento la emoción de  “A mis amigos”
Y “te llegará una rosa”,
me acaricia el alma.
Porque el te sigo queriendo,
“Como el primer día”,
calmará al sufriente
de “El Amor Desolado”,
y que querrán estar cual “Castillos en el aire”,
y estará el Tío Alberto
gozando su suerte,
junto a la piel fresca de su compañía.
Allí queda el tizón encendido de tus melodías,
soportando el llanto, “Cuando un amigo se va”
Poetas como tú, no mueren nunca.
Queda tu canto, tus palabras,
tu figura enorme y buena.
No partiste, quedaste entre nosotros,
para siempre y por siempre.
Mi querido Amigo, mi querido Alberto.

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