Entre lo negro y lo blanco
Soy sólo una pieza, pequeña, grácil
dentro de un inmenso rompecabezas
que nace y muere, entre gozo y tristeza
cada día de esta vida frágil.
Subsisto colgado en un péndulo
que en un vaivén me muestra lujo y ruinas
muestra caminos que se abren y cierran
sendas de flores, y sendas de espinas.
¿Cómo podría ser un dios o un diablo?
¿Cómo podría ser todo o nada?
¿Cómo podría pretender ser fuego
si soy también el agua que lo apaga?
Por eso aún del misterio de vivir
tengo sólo idea, una idea vaga…
Dimensiones, Buenos Aires, Magdala, 2008, pág. 31.
No hay comentarios:
Publicar un comentario