NORDISKA (II)
En el mismo camino en que se tiende
la noche junto a los astros
y extiende ya su arco al este del mundo
entre alas de extraños pájaros
que pasan, bajo la
sombra del norte
aún te
busco: en un trazo de hierba
medio deshecha y bajo
la nieve
yo te busco, empecinado y ciego
como aquel antiguo
rey de la peste
huyendo en pos de la sombra furtiva
del Hijo, así te
buscaba, vasta
sed insaciada, umbral
del dolor,
luz en el centro de todo lo que arde.
Och så
städer rasar, och natten
som en blomma, väller
in. (1)
(1) Y así los pueblos caen, y la noche
como una flor, se derrama.
ResponderEliminarBueno; Alejandro no me sorprende, Nordiska es denuncia, es congoja, es humanista.
Alejandro: así son las búsquedas. No hay lugar que quede sin mirar, sobre todo cuando se trata de sentimientos. Mi abrazo,
ResponderEliminarHe aquí un poema inquietante y significativo, con un transfondo revelador. Un abrazo, Lina
ResponderEliminarEl poema es como la hora mágica. ¡¡Muy buen texto!!! Ileana
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