Foto:
Alejandro Pi-hué
|
UNA NUEVA
FE
O cuantas estrellas en el silencio nocturno
Espían nuestros secretos amores
No sabría qué responderte
Ni las víctimas de una triple pandemia
O los muertos en las guerras imperiales
Alcanzarían el número suficiente
Y entonces Amor estornudó a su izquierda
Como lo había hecho antes a su derecha
En señal de aprobación
Quisiera que pudiéramos servir un día
A este único patrón
En la casa lejana
Que tiempo atrás hemos dejado
Pues mi mente anticipa el deseo del viaje...
Poseídos infurian los acólitos del viejo Tirso
En la cima florida
Soplan cornetas raucas
Golpean frenéticamente los parches
Y la Sudestada eleva aún más
Las olas del Río de Fuego
Que vienen a romper sobre las costas
Anegando barrios enteros...
Se oye entonces en las dos riberas
La carcajada acompasada
De un dios complacido
Una nueva fe
En un cambio perentorio
Y radical
Ve ya avanzar su tropa
Liberada de picanas
Camiones
Jaulas
Y reseros
No hacia el homónimo sitio
De Matanzas, Matadores y Mataderos
Sino más allá
Hacia el centro mismo del poder
Donde un palacio pintado
(Como quiere la tradición)
Con la sangre de muchos toros bravíos
Hace de símbolo supremo
Tal vez porque la tierra borbota
De nefandos delitos
Y los poderosos han expulsado
Toda idea de justicia
De sus corazones ávidos de lucro
De sangre fraterna
Los hermanos se manchan
Los hijos ya no lloran a sus padres
Los padres entregan fríamente a la muerte
A sus hijos
Lo lícito y lo ilícito se han mezclado
En una misma furia reivindicadora:
Yo te saludo puerta de los infiernos
Y del paraíso
Yo te saludo doble y única puerta
Que abre a los dioses y contiene
La feroz humanidad
En tantas ocasiones me has servido
En tantas otras me has salvado
Puertas adentro fue mi padre
El encargado de contaminar
La pobre casa de mi infancia
Haciendo de ella el refugio del terror
Y violando los sentimientos filiales
Tengo por única herencia
El brutal egoísmo
Y el interés demencial del déspota
Y del cobarde
A pesar tuyo transmitida
Honrada puerta cancel
Zaguán perfecto y protector
Túnel de los juegos y los pasatiempos
Hermana que nunca has podido
Atravesar ese umbral
Y has permanecido como yo
Fijada a un perno en el tiempo
No hay comentarios:
Publicar un comentario