EL EMPAPELADOR
Llega
a su término 1963. Las Universidades, Institutos, Liceos y Colegios han
concluido el período de exámenes y labores de fin de año. Docentes y alumnos se
aprestan a salir de vacaciones luego de un largo y pesado año de labores.
Juan
Gatica, el joven nortino de “tomo y lomo”, siente una profunda vocación por los
papeles, haciendo con ellos figuras de alto valor estético-cultural. Como barnizador
está convencido que el olor a la piroxilina le motiva el arte. También de sus
manos han salido preciosos tallados en madera, que sus primos, los “Z y Z”,
lucen orgullosos en sus vitrinas de exposición.
En
el instituto de “Artes Manuales”, Juan, recibe su título de: “Maestro Tallador,
Barnizador y Empapelador”. La práctica la realizó en la fábrica de muebles de
los primos Sergio Zapita y Pedro Zora cuyo logo es: “Muebles Z – Z Ltda.” de
gran prestigio a nivel nacional.
Sin
embargo, donde se siente realmente realizado, es como empapelador de casas,
oficinas y donde se requiera la aplicación de su arte. Tiene gran prestigio por
su responsabilidad, puntualidad en la ejecución, y entrega del trabajo
comprometido.
Han
pasado los años y Juan sigue soltero, sólo dedicado a su trabajo. Una tarde en
que se encuentra aplicando el engrudo en una pared, siente una fuerte descarga eléctrica
en su cuerpo. Siente que éste se alarga, se alarga y de pronto una extraña
fuerza lo plasma en el muro y lentamente se va esfumando hasta desaparecer
sintetizado en el pegamento.
Los
primos Z – Z encuentran una nota que dice: “El
arte es una dimensión desconocida. No me busquen. Estoy inmerso en el engrudo
de esta pared.” Adiós para siempre. Soy feliz. Juan…
No hay comentarios:
Publicar un comentario