NADAR EN EL AIRE, VOLAR EN
EL AGUA
Jeremías
sintió el rugido de la tribuna de Ferrari, aceleró a fondo y se hundió en la
primera curva de Monza sin importarle que Rosberg y Hamilton lo pudieran
encerrar o desplazar a la grava. Entró al negocio de quiniela, preguntó a
Carlitos si había salido el 44 en la nocturna de Montevideo, le dijeron que sí
y cobró siete mil pesos. Cuando terminó la avant premiere de El Ciudadano
ilustre en la Gran Vía, la gallega se le colgó del saco y le gritó…coño, que
fuerte, ni Oscar Martínez podría haberlo hecho mejor que vos. Recibió el pase
de Messi, eludió a Godín y la clavó en un ángulo del arco de los colchoneros,
poniendo loca a la hinchada culé. Llegó a Ezeiza, se sentó en la clase ejecutiva
del Boeing 777 de Air France, pidió champagne según le permitía el premio
Sorpresa del Banco Santander Río y le preguntó a la camarera a qué hora
aterrizaban en París. En la ventanilla de Piano vendió a 16 pesos los dólares
que un año antes había comprado a 11. Se puso de espaldas a la red, abrió las
piernas e hizo la Gran Willy, dejando tieso de asombro e impotente al bueno de
Murray. Hasta se dio el gusto de morirse Jeremías. Y ver tras la mortaja como
sus amigos ponían rosas rojas dentro del féretro. Le pareció justo el
reconocimiento, prueba de que su ego seguía vivo.
-Jeremías, Jeremías…ya son las siete, levantáte
carajo que tenés que ir a laburar, vago de mierda…o querés que te rajen de la
fábrica…tenés diez minutos para llegar a Lanús…
-Tranquila
vieja que hoy es viernes y el trompa cae al mediodía…hacéme un favor.…preparáme
la malla con tren de aterrizaje y el parapente con flotador…
-Pero Jeremías…¿ qué tomaste en la cena ?
-Nada
madre, ocurre que este fin de semana iré con los muchachos a la laguna de
Chascomús. Voy a nadar en el aire y volar en el agua…estoy ahora en la onda de
la literatura fantástica…me pasé toda la noche ejercitando situaciones en mis
sueños…
No hay comentarios:
Publicar un comentario