sábado, 22 de marzo de 2014

Alejandro Drewes-Buenos Aires, Argentina/Marzo de 2014

De las cosas graves y ligeras

Hace tanto se han secado
En la piedra esas lágrimas,
Tanto tiempo.  Dejaron el mundo
Y dejaron  ya de ser rojas.
No sabría decirte siquiera
Por qué, si es que una mañana
Lejana cayeron hacia la penumbra
Sin fondo de una tienda
En Babilonia o habrán sido
Acaso las de Safo por alguna
Joven sacerdotisa del Templo.

O quizás fueran de una lluvia
Largamente esperada
De agostados bosques  girando
Al viento sus últimas hojas

-las de Cristo buscando refugio
Bajo el bombardeo final
De Sarajevo-


4 comentarios:

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Alejandro, una pincelada de historia, ceñida en las cosas que importan pero que se pierden en el tiempo. Muy bueno, un abrazo,

Jorge Sombra dijo...


Tu poesía, Alejandro,
es axiomática.
Erotema conjetural
es tu poesía, Alejandro.

Teresa de Cañuelas dijo...

Me gustó: de un tema "trillado":lágrimas, se logra una buena versión personal y con sentido profundo.

Anónimo dijo...

uN HERMOSO POEMA ALEJANDRO !!!


sALUDOS jOSEFINA