HOTEL ACAPULCO
Mis manos demacradas siguieron escribiendo
convirtiendo en papel cada voz de la muerte
que no ha dejato testamento,
olvidando cuidar
lo que todos definen como el quehacer normal
de todo ser humano: oficina, hogar, familia,
el ideal, al fin, de una vida normal.
Abandonada en el lejano 2026, toda la defensa
de un contrato indefinido,
Marcado como desequilibrado,
encerrado en el centro de Milán,
en el Hotel Acapulco, un hotel decrépito,
reclamando la cosecha de sueños de los marginados,
agotando los ahorros de toda una vida
en revistas y comidas escasas.
Cuando los carabinieri irrumpiràn
en la decrépita habitación del Hotel Acapulco
y encuentren a otro muerto sin testamento,
¿quién contará la historia ordinaria
de un viejo cortavientos desgastado?
HOTEL ACAPULCO
Le mie mani, scarne, han continuato a batter testi,
trasformando in carta ogni voce di morto
che non abbia lasciato testamento,
dimenticando di curare
ciò che tutti definiscono il normale affare
d’ogni essere umano: ufficio, casa, famiglia,
l’ideale, insomma, di una vita regolare.
Abbandonata, nel lontano 2026, ogni difesa
d’un contratto a tempo indeterminato,
etichettato come squilibrato,
mi son rinchiuso nel centro di Milano,
Hotel Acapulco, albergo scalcinato,
chiamando a raccolta,
esaurendo i risparmi di una vita
nella pigione, in riviste e pasti risicati.
Quando i carabinieri faranno irruzione
nella stanza scrostata dell’Hotel Acapulco
e troveranno un altro morto senza testamento,
chi racconterà la storia, ordinaria,
d’un vecchio vissuto controvento?
No hay comentarios:
Publicar un comentario