lunes, 23 de mayo de 2011

Trinidad Aparicio-Barcelona, España/Mayo de 2011


No es fácil crecer

Si la naturaleza no nos agracia al nacer, no es fácil crecer.
Si un niño o niña crece al límite de los parámetros  que marca el  modelo normal de crecimiento, y si para colmo debe usar anteojos u ortodoncia, o peor aun, anteojos y ortodoncia a la vez, antes que la razón de la inteligencia no se imponga  a la apariencia, ese niño o niña, al crecer deberá de sortear y soportar en muchos casos la indiferencia e incluso las chanzas de otros niños que afortunados ellos, crecen guapos y robustos sobre  la línea normal de crecimiento. En el caso del niño acomplejado por sus gafas,  ortodoncia y su escasa musculatura, no faltará algún “superman” que  se interpondrá en su camino para marcar diferencias y distancias.  Las niñas,  tampoco se salvarán de que algún proyecto de futura “miss” las mire con arrogancia de arriba a bajo como si  del E.T. de Steven Spielberg se tratase. Si, no para todos es fácil crecer.

 Tampoco es fácil envejecer

            Puede uno  al nacer asemejarse a un hermoso serafín, puede que al crecer llegue a ser una beldad, pero... ¡Ay! Si no vende su alma al diablo como el Dorian  Grey de Oscar Wilde  (deseamos que no) el tiempo que no perdona ni respeta, se encargará con el día a día  de dejar su huella: vendrán anteojos, muy posible implantes o prótesis, los zapatos cómodos substituirán a los elegantes, se le reirán si en alguna conversación confunde palabras, o si en su presencia alguna persona joven se lamenta de alguna dolencia, que no se le  ocurra decir: “¿sabes? a mi también me due...” pues la interrumpirán, le recordarán la edad y le dirán que es lógico. No digas en voz alta: “chocolate por la noticia”Aprende a callar, que en boca cerrada no entran moscas.  Sucesivamente un ciclo reemplaza a otro, el otoño cede paso al invierno y éste cuando llega dice:¡Presente, la próxima estación retiro!. Si, tampoco es fácil envejecer.

3 comentarios:

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Mi Amiga querida: claro que no es fácil. Claro que nadie -salvo honrosas excepciones- llega, sin cirugías, a un ocaso sin arrugas o algún otro tipo de impedimento físico. Cierto es que los niños y jóvenes se critican duramente, hasta las lágrimas. Pero...hay cosas que se aprenden con los años, cuando el tiempo llena pentagramas con notas propias, esas que no se pueden borrar para hacer una melodía mejor. Buena reflexión.Te abrazo, Laura.

Anónimo dijo...

Que tal Trini!!!!

Claro que no es fácil crecer,

No es fácil vivir

Tampoco es fácil envejecer.

Pero con un humor como el tuyo,

con tus ocurrencias, todo es más fácil!!!!

Besos Trini
muchos carños Jóse

muchos cariños Jóse

Anónimo dijo...

Trini: Conozco tan de cerca lo difícil que es crecer cuando se es distinto. Ojalá los padres de niños en edad escolar leyeran tu reflexión y, mejor aún, la comprendieran. Un abrazo. Lilia