ÁMBAR
_ ¿Qué le pasará al Sol que se lo ve tan triste? _ murmuró la nube, sonrojada por el atardecer.
_No lo sé - respondió desorientada una liebre quien corría a otra compañera por el bosque compartiendo uno de sus divertidos juegos.
_No es lo mismo sin El _ advirtió la comadreja quien se apuró a sacar de su cueva al puercoespin y también a las ardillas.
_¿Y si le preguntamos?- interrogó el picaflor quien conversaba animadamente con una abeja la que trataba de tomar el polen de unas coloridas flores silvestres.
Y todos los habitantes del bosque se fueron transmitiendo la preocupación por su amigo el Sol, el qué tal vez estaría enfermo y precisaría que lo cuidaran.
_Sol,solicito, .Estás bien? - repitieron a coro todos los animalitos.
Casi desperezándose el viejo Sol, sonriendo y sorprendido les respondió:
_ ¡Gracias, Gracias por pensar en mi.! Me siento muy bien de salud. Lo qué pasa…lo qué pasa…
El Sol, tan grande y poderoso, de repente de amarillo se puso colorado, pero de vergüenza.
_ Es que hace miles de años que trabajo todo el día. Solo descanso un poco cuando las nubes me ayudan con una buena lluvia pero todos los días debo alumbrar, iluminar y calentar la tierra para que todos puedan verse y estar calentitos. También para que crezca la hierba y las plantas que después ustedes comerán. Del mismo modo los hombres disfrutan tanto de mi cuando llega el verano y ellos dejan de trabajar. ¿Y cuando me tocara a mí descansar? Para colmo, la Luna me hace guiños cuando me estoy por ir y ella se queda tranquila porque como todos duermen de noche no tienen mucho que hacer. Ah…salvo cuando hay enamorados que se quedan mirándola todo el tiempo. ¡Pero …Nadie se enamora de mi…!
_Bueno querido Sol no desesperes que te vamos a ayudar. Entre todos estuvimos conversando y nos pusimos de acuerdo: Las mariposas y los colibríes atraparán muchos de tus lindos rayos y los pondrán en un árbol del que brota un néctar que cuando se secan sus gotas los humanos lo llaman ámbar. Quedan como si fueran unas piedritas de colores. Dentro de ellas estarán guardados tus destellos de luz. Nosotros los repartiremos por todo el bosque y los humanos creerán que aún estas. Así podrás descansar un rato y también jugar con la Luna.
_Gracias mis amigos. Se nota que saben bien qué importante es la Naturaleza.
Tiempo después aparecieron un día juntos en el cielo el Sol y la Luna tomados de la mano. Grande fue la sorpresa de los animalitos del bosque al ver alrededor de sus amigos el Sol y la Luna, muchas pero muchas pequeñas estrellas que los acompañaban formando con ellos una hermosa, luminosa y feliz familia.
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