miércoles, 23 de abril de 2014

Reynaldo García Blanco-Cuba/Abril de 2014



LA CORTA DURACIÓN

Si las cosas duraran como la llegada de los años bisiestos no se acumularan tanto. Yo las tiro al vacío y ahí está Blaise Pascal para recriminarme. Licuadoras & arlequines de plástico. Sombrereras & otra vez esas flores horribles para poner al centro de la mesa. Paso de largo por las tiendas y me quedo encantado con las piernas de las vendedoras, sus labios marcados por la tristeza de vender cosas eternamente desechables.
Yo las acumulo. Las reúno en lotes de diez. Voy a los compradores de reciclaje y no las aceptan.
Esto es un intento para elogiar la corta duración de la vida de las cosas.

1 comentario:

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Reynaldo: tanto las cosas, como la vida tienen la duración necesaria. Hay cosas valiosas que, por esa razón, duran muchos años y otras que -como el hombre- mueren al poco tiempo de nacer. Un saludo de,