sábado, 20 de febrero de 2010

Jacinto Amado-Buenos Aires, Argentina/Febrero de 2010

De la vida y la muerte

( Consideraciones)


Maldigo todo lo que se mueva y lo que toque porque ya no tendré el valor

del verle y de percibir el tacto.

Al sol y a los astros, maldigo, y al viento y al mar y a los pájaros,

a la fe, mil veces maldigo!

Y a la esperanza, que dejará de acariciarme.

Nunca representaré al dulce pájaro en vuelo

Ni las tristes aguas podrán bañarse en mi.

A los niños y a los ancianos, maldigo

Porque no oiré ni llanto de arlequín

Y solo seré una marioneta gastada y maltrecha,

desarticulada y esquelética.

A la sombra y a los árboles maldigo,

Ellos querrán darme cobijo en la abrigada madriguera de la tierra.

¡ Cómo maldigo ¡

De ellos he de burlarme cuando ni la morada ni el aire tengan mi cuerpo,

que será polvo que esparsa el labriego y semilla para otra siembra.

¡ Ay, maldición de mi misma muerte!

A la congoja elegida

A la tristeza anudada

A la melancolía

He sido ser y parte de todas mis ínfimas partículas y he vivido cada una

para darme forma de belleza de fealdad de trino, de amargura, de decepción,

de alegría, y por todo eso le debo

Pero vamos. No te apiades

Que soy parte de ti y a ti me debo porque el camino lo recorrimos juntos

Que así es el arte de la vida

Y voy por la muerte.




1 comentario:

Anónimo dijo...

Que tal Jacinto??? Delicioso poema, que fuerza que tiene,

Un beso Jóse