OTOÑO
Equinoccio de tibiezas,
Como la templanza de un molino.
Intimo atardecer,
Implosión de hojas secas.
Soplo de cedrón y tilo,
inundando las cortinas y azulejos,
en la puritana cocina casera.
Se hace cuerpo el ocaso,
la piel se eriza como fresco polizón
el frasco de miel me mira de refilón
confirmando el sofoco del otoño.
1 comentario:
Me gusta esta poesía armada con tanta calidez y detalles caseros llenos de lirismo. Te felicito.
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