lunes, 21 de marzo de 2016

Cristhian Chiscul Uriarte, 20 años-Perú/Marzo de 2016



LEER

El éxtasis de un o una joven
yace en el centro de su corazón
de donde emergen
sus más profundas sensaciones.

Que al ser plasmadas dan la esencia
de una composición
donde la realidad
se combina con las ficciones,
de las que el lector espera
sean el ensalce
para su gusto deleitoso de leer.

José Alexander González Quizhpe- 17 años-Perú/Marzo de 2016



CUANDO ME ENAMORÉ DE UNA SIRENA
Preciosa, divina, fascinante, así te describo yo, aquel bohemio marinero que por cada milla recorrida en barco escribe canciones o experiencias vividas. Un día 14 de febrero cuando me dirigía hacia las Bahamas, por distraerme pensando en los embelesos del viaje, caí al mar y de pronto me vino a la mente la típica idea de una muerte fatal, que la bruma marina borraría mi existir, cual fuese mi asombro que aún inhalaba vida y esperanza. Oía como las traviesas estrellitas de mar me cantaban, los corales, extrañamente brillaban con colores fosforescentes, pero de pronto, las pupilas inquietas de mis ojos fijaron, drásticamente, su mirada en un solo ser. Era un sirena, para mi la más hermosa criatura del mundo de la fantasía, ella me guiñó un ojo y yo con mis delirios y pasiones por desbordarse, me dejé llevar y caí en su encanto: Me tomó de la mano y bailamos, románticamente, un vals (Todo complementaba ese mágico momento) Me besó en la boca con sus labios de perla y nácar, mis manos palparon su excelente contextura lumbar escamosa...
¡Ahh... mi sirena! Si vivo será un hermoso recuerdo lo que me lleve de ti, pero si muero será una muerte dulce y tranquila, porque descansaré y me reclinaré sobre tu amor, cubierto con una manta de caralolas y pececillos felices.

Nora Agustino-Comodoro Rivadavia, Argentina/Marzo de 2016

21 de Marzo Día de la Poesía




domingo, 20 de marzo de 2016

María Esther Ruíz Zumer-España/Marzo de 2016



                                 ME ALEJO

                            Una lagrima helada
                          rocían mis mejillas.
                          Petrificada.
                          Nocturnidad.
                          Congelada.
                         
                          Mi alma.
                          Refleja.
                          Temores.
                          Cristalinos.

                          Manantiales 
                          desbordan angustias.
                          Se acurrucan en mi pecho.
                          Tormentos.
                          Desvalidos.
                           Peregrina de caminos.
                           Anhelo.
                           Los recuerdos. 
                           Imploro.
                           No me busques,
                           Perdona.
                           Deseo andar mi destino
                           en soledad.
                           Encontrando mi propia
                           sombra.
                           Huellas clavando
                           en un adiós.
                           Esa soy yo.

Alejandra Zarhi-Marzo de 2016



DEJAME SER


Déjame ser
tu antojo clandestino,
tu juguete favorito,
la palabra muda,
la mirada paciente.

Sentirme
que habito
un mundo alucinado.

Quiero leer
tu timidez
tu confusión.

Transformar tu vida
en un vuelo mágico
y entender, que eres,
esa nube a la cual no logro llegar.

Juan José Soto/Marzo de 2016



Entrevista realizada a Rolando Revagliatti por Juan José Soto y difundida el 1.3.2007 en http://superavefenix.blogspot.com.ar/ de Perú



—¿En qué fecha lanzas oficialmente tu página personal virtual en la red?

—El dominio propio, estimado Juan José, lo tengo desde hace unos veintidós meses.


—¿Cuándo surge la idea y cuál fue tu motivación inicial?

—Originariamente, cuando yo todavía ni pisaba un cyber y con recelo neurótico atisbaba esa tecnología, el escritor y editor "Catalejo 2099", quien hacía unos años había realizado la primera edición electrónica de un poemario mío que él había editado en 1993 en la colección Libros del Empedrado y cuyo título es "De mi mayor estigma (si mal no me equivoco): ", me habilitó una zona para mí dentro de uno de los Sitios Web gratuitos que él manejaba. Fuimos nutriendo ese espacio personal hasta que hubo agotado su capacidad. Así fue que gestionamos el dominio propio. Trasladó todo lo que había en esa zona gratuita, en mayo de 2005, a lo que es hoy, formalmente, mi sitio de autor.


—¿Tuviste algún tipo de apoyo o auspicio para realizarla?

No lo tuve ni lo procuré. Ni siquiera hoy sabría a quiénes dirigirme.


—En cuanto a tu página personal, ¿cuál es la sección más visitada y comentada por tus usuarios?

—No sabría decirte con exactitud. Hace ya varios meses que no recibo de mi webmaster esas tablas coloridas con porcentajes que nunca entendí lo suficiente.


—¿Algún texto que haya suscitado mayor interés o respuesta de tu público?

—Ecos, desde luego, me llegan intermitentemente. No con arraigo en algo en particular. Llama la atención, por ejemplo, el número de ediciones electrónicas de libros que se encuentran disponibles. Interesa el alto número de fotografías donde son advertibles cientos de escritores argentinos y algunos extranjeros, que se incluyen en las diversas Galerías Fotográficas. Hasta donde yo sé, no existiría ningún otro Sitio en el que se exhiban tantas fotografías. Hay quienes destacan las reseñas de los Ciclos de Poesía y demás emprendimientos públicos que yo he ido produciendo en los últimos años. Hay quienes se refieren a los archivos de audio o a la sobriedad con la que se pormenoriza respecto de libros publicados tanto en soporte papel como en soporte electrónico.


—¿Puedes hacer un balance inicial de esta experiencia en la Web? ¿Crees que has logrado satisfactoriamente tus objetivos iniciales?

—El balance, sin duda, revela beneficios. Tantísimas puertas, ventanas y banderolas se han ido abriendo y así favoreciendo lo que para mí es principal: la difusión. En cuanto a las satisfacciones, ya sabemos, dotan de sentido a la módica existencia de cada uno.


—¿Qué piensas de la utilización más creciente del espacio virtual como soporte para la publicación de revistas literarias, páginas personales y libros virtuales?

—Me parece que todo suma. Como todo ha sumado siempre en esta lucha sostenida por oponerse desde lo artístico al poder de lo abyecto.


—¿Adviertes mayores ventajas que desventajas comparativas en el uso del espacio virtual en lugar del soporte tradicional (papel)?

—No me siento capacitado para discernirlo.


—¿Crees que los espacios virtuales tales como los weblogs están poniendo en jaque a los medios tradicionales de difusión? ¿De manera puntual, son los blogs una forma alternativa de difusión y expresión más abierta, democrática y libre ante los medios de comunicación tradicionales?

—No diría que, al menos ya, estén poniendo en jaque a los medios tradicionales de difusión. Los blogs, hasta donde los conocemos, son comparativamente más abiertos, en efecto.


—¿Esta atmósfera de la "globalización" o mundialización cómo crees que afectan a las culturas locales? ¿Se puede vivir al margen de la mundialización?

—Apenas lograría farfullar una respuesta, Juan José. Esto es: lo que podría argüir me resultaría insuficiente, sino precario. Así que mejor, no farfullo.


—¿Cuáles son tus revistas y páginas virtuales de literatura favoritas?

—Son ya muchas. De algunas prefiero la estética. De otras, los contenidos. En fin, que un relevamiento a conciencia me demandaría demasiado tiempo. Y no soy de no meditar lo que afirmo.


—¿Tienes contacto con las páginas Web y weblogs literarias peruanas? ¿Puedes mencionarnos alguna de ellas?

—Recuerdo ahora, sin categorizarlas, y olvidándome de algunas, Fuego Fatuo, Sierpegrana, Letras y Artes, Bocanada, Terraignea, Lapsusweb, Ornitorrinco, La Tortuga Ecuestre, Sol Negro, Remolinos.


—¿Cuáles son los libros que han causado mayor impacto en tu proceso creativo o en tu contactos con la literatura?

—De entre los muchísimos, claro está, que podría citar, elijo mencionar "Martín Fierro" de José Hernández, los poemas del uruguayo Yamandú Rodríguez, "Fausto" de Estanislao del Campo, entre lo que sería la poesía gauchesca. "Sonetos mugres" de Daniel Giribaldi, "La crencha engrasada" de Carlos de la Púa, entre lo que sería la poesía lunfarda. "Trilce" de César Vallejo, "Residencia en la tierra" de Pablo Neruda, "Hojas de hierba" de Walt Whitman, "Gotán" de Juan Gelman, "Los invisibles" de Julio Huasi, "Las muertes" de Olga Orozco, "El cuerpo lesbiano" de Monique Wittig, todos ellos de poesía.


—¿Qué autores consideras de cabecera o lectura necesaria en tu experiencia como lector y creador?

—James Joyce, Jorge Luis Borges, Abelardo Castillo, Nicolás Olivari, Paul Auster, Alejandra Pizarnik, Samuel Beckett, Nicanor Parra, Octavio Paz.


—¿Puedes definir tu experiencia en la red en un par de líneas?

—Sospecho que esta pregunta se encuentra ya sucintamente respondida. Añado, a modo de ejemplo, que jamás se hubiera producido la quinta edición de mi poemario "Ardua", bilingüe castellano-neerlandés, y editado en Holanda el año pasado. Se fue dando primero por el espontáneo interés del traductor, belga, y luego por la propuesta de la editorial Stanza.







*





Federico Skliar-Argentina/Marzo de 2016



Miguel Cantilo ídolo de siempre
Con una pluma en la mano supo un dia contar,
esa historia argentina de una manera habitual, 
miguel cantilo tenia el dia que empezó,
esa magia divina de regalarnos rock and roll,
poeta urbano y rebelde contra la corriente fue,
entusiasmado por siempre protestando con nivel, 
el vive en una ciudad donde manda la maldad,
ahora hasta la transgresión  premiada uno la encontrara, 
por donde andas miguelito cada fanatico  pregunto, 
queriendo volver a verte pronto,
viendo tu frente sudada de cantor,
celeste y blanca es tu guitarra tu corazón porteño será,
cuando desde un  parlante enchufado tu voz aplaudida este, 
nadie te quita tu libertad vos nacistes un dia para triunfar, 
tus éxitos ya son ofertas que todos supieron comprar,
sin descontar un talento que es tu marca individual, 
con pelo largo o corto lo mismo un dia será,
ya que solo importa el como sabes con pocas palabras contar, 
la realidad se divide pero nunca anclara,
ese espíritu joven de querer todo cambiar, 
marcha de los roqueros encabezada hacia plaza de mayo hoy va,
con miguel y mas de una guitarra formando duos para protestar, 
con  la bandera argentina  que en el corazón  llevas, 
pidiendo que se vote una ley, 
para que todos disfruten de tu genialidad, 
tu rock solo en  la vida uno lo  va a encontrar, 
teñido de rimas perfectas que mas de una radio pasara. 

Luis Tulio Siburu-Argentina/Marzo de 2016



 SERPENTINA
Si alguna vez te enredaste con alguien y bailaste tango toda la noche, sin poder despegarse uno de otra, otra de uno.
Si no intestaste mirarle el rostro bajo el antifaz, la ropa, el cuerpo; apenas quisiste aspirar su perfume y su aura.
Si no se te ocurrió detener el movimiento, sentarte a un costado, buscar la oscuridad, alejarte de la música, tomar una copa.
Si la amaste desde el primer compás, el segundo corte, la tercera quebrada, el cuarto pisotón,  la quinta disculpa, el sexto no es nada.
Si te hablaste todo y ella quedó callada, o al revés, si ella no paró de parlotear y vos sólo escuchabas.
Si no te diste cuenta que al lado tuyo había corso, comparsas, pomos con agua, cornetas, papel picado, disfraces y carcajadas.
Si olvidaste ahora su nombre y su voz,  un collar de lentejuelas, los lunares pintados en la mejilla y esa flor que llevaba en el cabello.
Es probable entonces que hayas estado en la calle Boedo, casi San Juan, hace más de cincuenta años, en esas noches de Momo,  cuando una cuadra era peatonal por cuatro lunas, para danzar sobre adoquines y vías de tranways.
Sin darte cuenta o quizás consciente, no quisiste desenredarte y seguiste idealizando un encuentro efímero, así como – aún con poca memoria - seguís  silbando hoy  “Después de carnaval”, del maestro Amuchástegui Keen.
Y ahora querés comprender qué pasó, qué misterio hubo, donde estará  aquella mascarita, porqué te sentiste unido a ella.
Casi seguro que de un balcón arrojaron una serpentina, azul o bordó vaya a saber, sin brillo, de papel de descarte, como eran antes, como no son ahora.
Y ella – a pesar de su fragilidad - los rodeó a ambos fugazmente, atándolos en un dos por cuatro que se quedó allá lejos. En uno de los cuatro días locos.

Nilda Sena-Argentina/Marzo de 2016



ME QUEDA…

Me queda el canto del gorrión
en la ventana abierta
y el llanto no producido.
Me queda el nido en el árbol
y la cuna vacía,
con gorritos y escarpines no estrenados.
Me queda el ángel escondido
que de la guarda no sabe
y los suspiros de los meses sin aire.
Me queda la canción de cuna
en el  nudo de la garganta
y el primer “mamá” ahogado en el silencio.

Ana Romano-Argentina/Marzo de 2016



Al detener


Detuvo el trompo
y contempló
Sin despegar
y en desdén
Hundida en la mujer
¿qué anudaba?


Agustín Alfonso Rojas-Chile/Marzo de 2016



ZARCILLO NUEVO

            El Inspector Jiménez, miembro de la “SICH” (Servicio de Investigación de Chile), había cumplido dos años retirado de la institución. Sin embargo durante los primeros cuatro meses fue llamado de urgencia, para que ayudara a resolver crímenes que otros funcionarios, por falta de experiencia, no lograron hacerlo. Desde entonces, se ha dedicado a la lectura y análisis de tantos casos en que fue protagonista, cuyo resultado en más de ciento cincuenta: mafiosos, criminales y otra calaña de parias, purgan sus delitos en cárceles del país.
            Hoy, viaja cómodamente sentado en el carro de primera clase en el tren que une Valparaíso con Santiago. Cuatro horas demora la máquina en unir ambas ciudades, tiempo que aprovecha para contemplar el agreste paisaje.
            Sin embargo, ansioso de conocer las últimas noticias, abre “El Mercurio” de Valparaíso. Le llama la atención un artículo que habla de un lugar llamado “Zarcillo Nuevo”. Es un reportaje escrito por una periodista que años atrás, por esas cosas del destino llegó a ese lugar, en medio de un fuerte temporal de nieve y viento, al separarse y perderse de sus compañeros de excursión en la zona de los Valles Transversales.

            Zarcillo Nuevo, se ubicaba aproximadamente a 20 kilómetros del caudaloso río “Matafango”. Su población era de 300 habitantes, quienes vivían en chozas bastante amplias, construidas con ramas de chamiza embadurnadas. Los techos entotorados, cubierto de barro, les proporcionaba frescura en verano y temperadas en invierno. Cada familia mantenía su propia huerta, árboles frutales, aves de corral y otros animales. Había campos comunes que los cultivaban con  legumbres. El trueque era su moneda de cambio.
            Era un villorrio feliz. Algunos pensaban que en ese lugar estuvo “El Edén Bíblico”. El agua escurría por el lecho del río, valle abajo. No había autoridades. Los problemas los solucionaba don Pascual, el patriarca del pueblo. Dueño de un pirquén del cual extraía, pequeñas cantidades de oro en polvo, el cual comercializaba una vez al año en Santiago, distribuyendo el dinero obtenido entre la comunidad. No había iglesia, sin embargo, tiempo atrás vivió un sacerdote que con su esfuerzo y el de la comunidad, levantó una pequeña capilla, en cuyo interior se reunía el pueblo a escuchar la palabra de Dios.

            El Inspector Jiménez, continúa leyendo muy interesado: Un día en plena primavera, bajo un manzano, fue encontrada inconsciente una bella muchacha, quien luego de unos días de reposo en casa de don Pascual, comenzó a pasear su exuberante anatomía por los diferentes rincones del poblado. Su belleza fue disputada en verdaderas batallas, entre los jóvenes que pretendían sus favores. Hasta que, cierto día, desapareció tal como había llegado, sin dejar rastro alguno. Lo extraño del caso fue que, junto con ella, desaparecieron tres muchachos de la aldea...

            “Sin duda, había entrado a ese lugar, la discordia, el engaño y la traición.” - Piensa el Inspector Jiménez.
           
            Jiménez cierra el periódico, entorna los ojos, cavila un instante y luego, aparece en la comisura de sus labios algo así como una sonrisa. “He resuelto el dilema” dijo para sí. “Los desaparecidos están sepultados bajo el piso de la capilla”.
            Abrió de nuevo el periódico...continuó leyendo... Diez años después, durante un fuerte temporal, cayó un rayo sobre la capilla, siendo consumida totalmente por el fuego. El sacerdote, murió aplastado por una viga, al intentar entrar a salvar el cáliz y otros objetos religiosos...Durante la remoción de los escombros, aparecieron los restos de los cuatro desaparecidos.
            Jiménez, cerró el periódico, se arrellanó en el asiento, cerró los ojos y se quedó dormido...

Ascensión Reyes (Poema)-Chile/Marzo de 2016



SUPERFICIE  AZUL


¡Tierra!….
Minúscula brizna de vida
entre el cosmos infinito.
Pero también…
inmensa superficie azul
donde el hombre cumple su ciclo.

Eres pródiga o mezquina,
traviesa o caótica,
estas plena de extremos.
Sin embargo, eres nuestro abrigo
y nuestro destino.

Misión nuestra es cuidarte,
custodios de tal legado
que verán nuestras herencias.

Ascensión Reyes (Cuento)-Chile/Marzo de 2016



VIVIENDO UN ENSUEÑO

     La Feria Regional exponía los más diversos progresos en cuanto a manufacturas de última generación y tecnología. Yo estaba trabajando en el Stand de una subsidiaria alemana que exhibía modernas máquinas de escribir, armadas en el país.
     Entre el gentío que circulaba por los pasillos del gran recinto, de pronto reparé con sorpresa que en el Stand de maquinaria agrícola, atendía un hombre relativamente joven. Pienso que lo de relativo es válido, porque su cabeza rubia estaba raleando en la corona. No le vi la cara, en ese momento estaba inclinado. Pensé que a este personaje ya lo había visto en alguna otra ocasión. Posiblemente en mi oficina o bien en el bus, en los trayectos diarios hacia la Feria. Aquel día ya había llegado la hora de cierre, ordené mis papeles, folletos, y guarde todo el material, como habitualmente lo hacía. Mi secretaria tuvo algo que hacer, se había marchado antes. Al cerrar la cortina metálica, di una mirada al personaje que había llamado mi atención. Me estaba observando y ésto me produjo un estado de nerviosismo extraño. ¡Sí!, estaba segura de haberlo visto en alguna parte. Lo vi hacerme un cordial gesto de despedida. Creo que me puse colorada, di media vuelta y me puse el abrigo negro sobre mi traje también negro. Estaba de luto debido al reciente fallecimiento de mi madre, con quien había compartido sus últimos años.
Al día siguiente, busqué con la mirada al hombre del Stand, pero no estaba, en esta ocasión lo atendía un jovencito que se mantuvo hasta el día anterior a la finalización de la muestra.
Cada día, al prepararme para ir a mi trabajo y mientras me miraba en el espejo y en mi mente se alojaba la imagen de aquel hombre, preguntándome ¿dónde lo había visto?
El último día llegué muy bien vestida, me había mandado a confeccionar un traje con mi costurera permanente, quien en esta ocasión me dejó completamente feliz. La imagen que me devolvía el espejo reflejaba una mujer de treinta años, de buen físico, piernas y busto moderados y un rostro donde cualquier maquillaje cambiaba positivamente el conjunto. Este día, al llegar al Stand…! Sorpresa, ahí estaba él!
Creo que sentí un golpeteo en el pecho que me pareció extraño. No sé si lo soñé o fue real. Me fue a saludar y a comentar acerca del desarrollo de la muestra. Dijo su nombre. Ignacio. Yo lo encontré muy acorde con su personalidad. Conversador, alegre y todo cuanto admiro en un hombre. Aunque gran experiencia no tengo porque a mis años nunca he tenido un candidato, ni para pololear, sólo he tenido amigos informales. Le dije mi nombre, pero cuando me preguntó donde vivía, desvié la conversación. Cuando todos nos retiramos coincidimos en el bus de camino a casa, pero íbamos en asientos separados. Yo contemplaba el mar, era verano y una luna llena hacía una senda luminosa en las aguas calmas de la bahía. Ahora veía este panorama como si tuviera, por primera vez, una ilusión por un hombre a mi medida.
     Pronto me reintegré a las oficinas de la firma para la cual trabajaba. El tipo se me había grabado en el pensamiento, lo veía pasar una o dos veces a la semana, por la acera que correspondía a mi ventana. Por ella podía observar gran parte de la calle a través de un visillo que había descorrido a propósito. Al cruzarse  nuestras miradas, me saludaba con una sonrisa.
     Un día me esperaba al salir del trabajo y curiosamente caminó a mi lado hasta llegar a mi domicilio, no me dijo ni media palabra. Sólo sentía el sonido sincrónico de nuestros pasos en el silencio de la calle adoquinada. Ahora yo vivía en la casa que compartía con mis hermanas, a quienes nunca me habría atrevido a contarles sobre esta aventura.
      Al despedirse me dio un beso, ante este avance romántico, cerré los ojos y no supe qué hacer, porque de pronto estaba sola, el hombre había desaparecido, como quien apaga un interruptor.
Una semana después, otra vez me esperaba a la salida, yo estaba ansiosa por saber detalles de su vida, pero no me hablaba y no sé por qué razón yo tampoco lo hacía. Nos dirigimos al parque. Ese atardecer caluroso, nos sentamos en un banco que estaba solitario bajo un árbol frondoso, ocultándonos de las miradas curiosas de los que pasaban por la vereda cercana. Me tenía tomadas las manos, luego me besó, me besó muchas veces. Yo me sentía arder de vergüenza, pero no me podía negar porque este hombre me había hechizado desde que lo vi. Creo que por primera vez estaba realmente enamorada. Ya estaba oscuro cuando recapacité, estaba sola en el banco, sin embargo sabía que ese hombre me había hecho su mujer casi sin darme cuenta. Sólo recordaba sus caricias recorriendo todo mi cuerpo. Sin embargo mis ropas se veían tan ordenadas como siempre.
     Llegue a mi casa y pensé que este asunto romántico ya había avanzado demasiado, le tenía horror a una maternidad sin estar casada. Tome la firme determinación de acabar esta extraña aventura en beneficio de mi salud mental. Sin decírselo a nadie, opté por buscar compañía. A la salida de mi trabajo, siempre me iba con alguna amiga o compañero que hacía el mismo recorrido mío. Cuando iba a mitad de camino lo divisaba parado en una esquina, como espiándome para saber con quien me juntaba. Imaginé que el hombre me estaba acosando. Un día supuse que algo le habría pasado porque dejé de verlo. Pero el hecho que no apareciera me hizo sentir más tranquila, aunque pensé que era una crueldad de mi parte. Y ese contrasentido me puso bastante irritable.
     Como en una nebulosa recuerdo que, de pronto empecé a sentir una extraña euforia, o más bien un estado de ánimo que no podía controlar. Algo atisba mi mente a recordar de aquel momento, podría decir de insanía. Creo que me exalté más de la cuenta por algo que me contradijo mi jefe, sin gran importancia. En ese momento mis hermanas decidieron internarme, contra mi voluntad en una Clínica, donde me borraron hasta el último pensamiento. Fue como nacer de nuevo.
Con los años supe que este romance, nunca existió. Ignacio, era el nombre del doctor que me atendía, y lo más importante, mi virginidad siempre ha permanecido intacta.

Ascensión Reyes (Comentario libro)-Chile/Marzo de 2016



EL PERFUME DE PATRICK SUSKIND

      Nació en 1946 en Baviera, Alemania. Realizó estudios de Historia medieval y Moderna en la Universidad de Múnich  y en  Aix en Provence entre 1968-1974. En la década de 1980 trabajó como un guionista televisivo, para Kir Royal y Mónaco Franze entre otros. Su padre, Wilhelm Emanuel Süskind, fue escritor y traductor, trabajó durante largo tiempo en el periódico alemán Süddeutsche Zeitung. Su primera obra fue un monólogo teatral titulado El contrabajo, estrenado en Múnich en 1981. En la temporada 1984 - 1985 ofreció 500 representaciones, convirtiéndose así en la pieza de teatro en el idioma alemán, con mayor duración en cartel.
      Pero su éxito llegó con su novela El perfume, bajo el título original Das Parfüm, die Geschichte eines Mörders (1985), traducida a 46 lenguas, entre ellas el latín, rápidamente convertida en un bestseller con aproximadamente 15 millones de ejemplares vendidos y convertida en éxito cinematográfico en el año 2006 por el director Tom Tykwer, tras 15 años de arduas negociaciones. Otras obras suyas son: La Paloma (1988), La historia del señor Sommer (1991), Un Combate y otros relatos (1996).
      El perfume, está dividido en cuatro partes y cincuenta y un capítulos, transporta al lector a un mundo con el que no está familiarizado,"el evanescente reino de los olores", a través de su protagonista, Jean-Baptiste Grenouille (grenouille significa rana en francés).

      EL PERFUME
   COMENTARIO
      Jean-Babtiste Grenouille, nació cualquier día y por azar, en los arrabales más pobres y dejados de la mano de Dios, allá por la Francia del siglo XVIII.
      Su madre una meretriz, da a luz este hijo no deseado y a consecuencias del parto muere, dejando un huérfano, rechazado por todas las personas que deben cuidarlo, porque tiene una particularidad muy especial. Este pequeño ser, carece de olor, defecto que lo acompañará durante toda su vida, en cambio su fino olfato lo hará percibir olores que para otros seres normales pasan desapercibidos.
      Tiene una infancia solitaria y triste, en que es tratado con rigor por quienes están a cargo de él, y pese a ello sobrevive. Casualmente, en su adolescencia llega al laboratorio del perfumista Baldini, famoso por crear aromas a pedido de nobles y de personas adineradas. Allí aprende todas las técnicas para conseguir aromas desconocidos o repetir algunos. Pero al cabo de un tiempo, decide aislarse en las montañas para meditar y pasa un gran tiempo aislado en una cueva de los Montes Cantal.
      Su meta es llegar a Grasse, y prosigue su camino, su olfato lo induce a sintetizar un olor con el que impregnará su cuerpo para ser considerado como una persona normal. Casi lo consigue captando el perfume que emiten bellas jovencitas a quienes debe matar, para luego de un complicado procedimiento, captar en una esencia ese perfume que emana de la pureza, la bondad y la inocencia, ese olor que conquista a todo el mundo y que él lo necesita para si mismo.
      Este afán de captura, lo convierte en un criminal serial, que no descansará de asesinar a varias mujeres jóvenes hasta descubrir a Laura, una bella joven, hija de un hombre importante, que según Jean-Babtiste Grenouille, su aroma captado a la distancia, es el perfecto para crear finalmente ese perfume que lo hará totalmente feliz. 
   El Perfume, es una novela de alto contenido conceptual, en que el realismo mágico se hace presente, engarzado en la realidad francesa de su tiempo. 
      El perfume es aquello que identifica a cada persona como un ser único e irrepetible, esencia que emana desde el nacimiento. Ese intangible que en algunos trasciende e induce a ser aceptado o rechazado dentro de una sociedad que es exigente. Esta novela, en este caso traducida al español, resulta entretenida, aunque su mensaje se capta en una doble lectura, la que nos permite desentrañar algo tan simple como una huella digital, en los olores.