fotografía: Josefina Fidalgo
Entrevistamos en su estudio atelier de la Avda Santa Fé, en pleno centro de la ciudad de Buenos Aires, al reconocido Arquitecto y Artista Plástico, Clorindo Testa. Por estos días expone en la Mutual de Arquitectos, ubicada en la Avda San Martín 1565 de la localidad de Florida, Partido de Vicente López, Buenos Aires, Argentina.
P: ¿Qué fue lo primero, la arquitectura o la pintura?
CT: Todas las cosas que hice en mi vida las hice simultáneamente. Las dos actividades las comencé al mismo tiempo. Cuando volví de Italia, luego de haber estado becado por tres meses y haberme quedado más de dos años, allá por el año 1951, me encontré con los arquitectos Gaydo, Rossi y Davinovich con quienes participamos en un Concurso para el edificio de la Cámara Argentina de la Construcción , que ganamos. Y al año siguiente, en el 52 hice mi primera exposición de pinturas en la Galería Van Riel.
¿Son dos grandes amores compartidos o se inclina por alguno en particular?
En realidad son las dos cosas que siempre hice, porque la manera de empezar hacerlas, de pensar un cuadro o una cosa de arquitectura es igual.
¿Un estilo en particular?
En general ahora son cuadros abstractos, digamos, porque siempre me gustó hacerlo, no hago cosas figurativas, por lo menos por ahora, porque los movimientos en uno siempre van cambiando con el tiempo, no se pinta ahora como en 1950, la arquitectura tampoco es la misma.
¿Dedica algún día en especial para la pintura?
Yo vengo a trabajar todos los días a las 9 de la mañana, pero el sábado pinto, o algo parecido a eso. Como organización pinto los sábados, a la mañana en especial. Hago un punto de color y allí comienzo. Y también durante la semana termino algo.
Su estilo en Arquitectura, se llamó brutalismo.
Si, era una arquitectura de la época, una estructura de hormigón armado, un modismo de los años cincuenta y sesenta. La Biblioteca Nacional y el Banco de Londres son dos concursos que ganamos, el primero con Francisco Bulrich, y Alicia Casaniga, su mujer y sí, son dos obras de las más importantes.
La arquitectura y la pintura forman parte de su vocación, ¿las hereda de familia?
Papá era médico. Y cuando yo estaba en el secundario me preguntó qué iba a estudiar en la universidad y yo le dije, a lo mejor medicina, y él me respondió “de ningunísima manera”, con lo que allí se acabó mi primera vocación médica, pero siempre me siguió gustando…
Precisamente Usted tiene una particular comparación entre los edificios y el cuerpo humano.
Sí. Si uno hace un dibujo de un cuerpo humano y al lado hace el dibujo de un edificio y al cuerpo humano le pone un esqueleto y al edificio le pone una estructura de hormigón armado y al cuerpo humano le pone las venas que suben y bajan y al edificio le pone las cañerías de agua caliente y de agua fría, y le pone el corazón al cuerpo y la sala de máquinas al edificio se van a dar cuenta que el edificio es muy parecido a un cuerpo, son iguales, tienen todo lo que tiene uno.
¿Le gusta vivir y trabajar en Buenos Aires?
Sí. A mi la ciudad me gusta. Es una de las pocas ciudades del mundo que tiene mucha luz. En otras ciudades no hay medianeras, aquí los lotes son chicos. Entonces hay una construcción baja y al lado un edificio de 8 pisos. Entonces las medianeras actúan como si fueran espejos, hay mucha luminosidad en esta ciudad. No la cambiaría.
2 comentarios:
Gracias Graciela por este excelente material.
Un abrazo enorme.
Silvia Loustau
www.silvialoustau.blogspot.com
Al periodista lo felicito, un reportaje marvilloso mi querido amigo Raúl; y el mismo elogio para la fotógrafa multifacética , la señora Josefina Fidalgo.
Beatriz Pozzi
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