lunes, 20 de diciembre de 2010

Delfina Acosta-Paraguay/Diciembre de 2010


Los modos de marcharse

Hay modos de marcharse de la vida:
poco a poco
se van de tu memoria
los versos más hermosos de Rimbaud.
Te ocurren dos fatalidades juntas:
se te muere la rosa
que al mirarla quisiste
con suspenso de niño,
con el amor de Dios,
y se entierran, también, en el jardín,
las hojas amarillas de tu alma.
Para llenar las horas de la tarde
vas y vienes del tiempo
en que quedó el recuerdo
de aquella boca tibia ayer besada.
Hay modos de marcharse
de la vida:
poco a poco
se van de tu memoria
los versos más hermosos de Rimbaud.

3 comentarios:

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Delfina: ciertamente la vida tiene distintos modos de ir marchándose de la memoria. Algunos olvidos provocados, otros no tanto, conforman lo que ayer fue nuestro presente con distintos matices.
FELICIDADES,

Jorge Sombra dijo...

Me encantó la poesia de Delfina, comparto los conceptos de Laura
Jorge Sombra

Anónimo dijo...

Hermoso poema. Nos vamos marchando de la vida cada día.
Felicidades.
Mirta Pérez