La
llamada
Ademanes
tuyos que me conmovían:
La
forma de recogerte el pelo hacia atrás
Sosteniendolo
con la mano derecha
Girando
en tirabuzón hacia la izquierda hasta anudarlo
La
solicitud piadosa de tus caricias
Cuando
lo necesitaba.
La
ondulante lascitud del lápiz labial,
Recorriendo
tu boca
El
rimmel anocheciendo tus pestañas
Delineando
los fanales almendrados de tus ojos.
El
ocaso del día encendiendo las ganas
forma
oculta del paraíso
donde Juana de Arco jubilosa como una vela
se
consumía
hasta
la mueca final que yo esperaba ansioso
Después,el
tiempo.
El
adiós, las ganas de decirnos algo
Y
la misericordia de la amabilidad
En
la despedida.
Después
Los
caminos bifurcados
Nuevas
parejas, diferentes historias , hijos
Pero
quedaron cenizas de aquel fuego
Vestigios
secretos: un libro tuyo por devolver
Una
prenda que escondí por años
Con
tu perfume.
La
memoria, los sueños, refugio blindado de los recuerdos
Ahora
Quise
desandar el camino.
Extemporáneo
, solo, ridículo, devolver aquel libro
y
decir de este dolor oculto en la memoria,para liberarme.
Busqué
en una agenda polvorienta
Y
te llamé. Atendió tu voz pero más joven.
Y
así, me enteré sin previo aviso
Que
habías salido de gira para siempre.
Llamé
al pasado y me atendió el destino.
1 comentario:
Muy bueno Horacio, muy sentido y con un final fuerte y desgarrado.
Zulma
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