jueves, 23 de octubre de 2014

Luis Tulio Siburu-Buenos Aires, Argentina/Octubre de 2014


Ardiendo      

se fue quemando de a poco

en el tamaño de su mentira
en la demora de su entrega
en la hipocresía de sus actos
en el fingir de sus sentimientos
en la cobardía de su silencio
en el escape de su pasado
en el escondite de su existencia
en el callar a solicitudes
en la indiferencia a visiones
diferentes de la propia


vaya a saber
quien arrojó el fósforo
quien arrimó  madera blanda
quien apantalló la pira

no es una fogata común
pero arde como el infierno

tuvo la oportunidad de evitarla
pero no pudo o no supo
o no quiso

ahora es tarde

esa soberbia sostenida
eso de querer ser lo que no se es
convirtió una imagen en ceniza
y en una tragedia su historia

1 comentario:

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Luis, hassbido ejemplificar la degradación de una persona, hasta desaparecer junto a sus no valores. Un abrazo,