Ismael Oscar Barceló-Loma Negra, Provincia de Buenos Aires, Argentina/Diciembre de 2009

LLUVIA DE PERROS

Es una noche de perros y tierra mojada que me empapa las narices, una noche de lluvia ensordecedora sobre el techo de chapa, noche fría que me congela el pensamiento en aquellos días lejanos.
Escucho el viento, suena a violines apagados... será por eso que los pensares han venido a rescatarme; vienen ladrando sin bozal, algunos buenos y otros no tanto; qué no daría por saber qué o quién me los está trayendo en esta noche de lluvia y truenos oscuros, me lo pregunto en voz alta por si acaso la soledad me escucha... y abre una puerta... y entre una bocanada de cielo limpio.
La lluvia, el viento, el frío o quizás los duendes de la noche me estén jugando una buena pasada... solo la ventana que me sostiene y esta noche de perros sueltos conocen la respuesta, pero ya estoy lejos y no podría escucharlos, aunque quisiera, desde mis días lejanos...