Paz
Bajo un Cielo insomne
Gozo de la paz que me brinda el cóndor,
Con su vuelo firme, sereno y agudo,
Que cruza el macizo como una saeta,
Sobre las montañas,
La paz que me brinda la nieve tan nívea.
Posada en los Andes,
La brisa me empuja hacia la llanura,
De un verde tan dulce
De montes repletos de aves canoras,
Que pian alegres,
Porque en el ramaje se encuentran sus nidos
Con mil corazones, palpitando vida,
Hermoso es sentirla,
Que gozo tan grande, cuando esos pichones
Se lanzan volando buscando en las nubes,
Gloria e ilusiones, siguiendo la rueda,
Se vive esperanzas, el círculo cierra,
Y las aves cantan un canto a la vida,
Y yo voy cantando, en alas de un ángel,
Sus plumas muy blancas acarician mi alma,
Me lleno de gracia, conllevando todo,
Mar, montañas, ríos, como golondrinas airosas,
Volamos buscando horizontes que nos pertenecen,
Gozando las mieses de trigos dorados,
Y mi vista inquieta ve espigas de fuego
Es que Dios bendito con caricia suave,
Las va madurando, para convertirlas en blancas harinas,
Y luego en un himno, en panes dorados,
Vendrá la gran fiesta, llenos de entusiasmo
En esta paz nuestra, misterio, y destello,
Pidamos un mundo de amor y canciones
Aromas de patria, orgullo genuino.
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