Daiana Alejandra Ibarra-Argentina/Junio de 2016

Será que sé esconder muy bien lo que prefiero callar o usted es experto en aludir sentimientos...

La experiencia en ocultar sentimientos no requiere de años, sino de daños,
de mínimas experiencias de dolor que se entierran en nuestro ser para no liberarnos.
Ésto hace a el ser humano débil , débil porque al primer instante de dolor huye sin intentar regresar,
No es en manera de condena que el cielo llora por las noches,
pero pareciera que apropósito va dejándonos sin aire.
La huella que no se borra es porque ha sido bien pisada,
el beso que no se olvida es porque ha sido bien dado,
los ojos que aún nos miran son los que han penetrado nuestra alma
el deseo que no apaga su llama es porque
se mantiene vivo con un cierto y conocido sentimiento llamado amor.
A veces parece que me habla entre dormido, es como si fuera real
que tontamente le contesto, descubriendo que solo es una alusión
es sólo ese maldito daño que se enterró en mí y no me libera.
Algún día sé que tomaré el coraje de vivir con la idea
de que lo nuestro no fue a causa del destiempo;
y cuando así sea aprenderé también a vivir sin él,
mientras tanta y a consecuencia de ese aprendizaje
escribiré mil pasajes que rimen con su nombre.
Aquí a quedado sacudido mi mundo
dónde en ciertos momentos me sentí volar
y ocultar lo que siento no me llevó años
sino el simple daño de perderlo.
No explicaré como es que aún lo sigo amando,
no recogeré los sueños tendidos en el suelo,
no mostraré sonrisas porque él se las ha llevado todas,
no yacerán mis esperanzas junto al tiempo
ni acunaré deseos incumplidos...
Ay amor, sólo si estuvieras aquí conmigo!!!