AHORA...
El ocaso anidó en mis manos y pasó...
Fugaz... Como una gaviota... Pasó... Efímero, fugaz…
Como brisa leve de primavera… Como aleteos en los pinos…
Como mariposas en la hiedra…
Ahora, el celeste pálido lo inunda todo…
Hay un suave resplandor en mi ventana...
Tenue… Silencioso… Efímero como el ocaso…
Fugaz como las gaviotas… Leve como las mariposas…
Herido y nauseabundo como los recuerdos que duelen…
Que marchitan el alma…
Ahora… Ahora… Es el instante que quiero atrapar y no se detiene…
Es la nostalgia de otros atardeceres…
Es la nostalgia de las manos de mi padre aferrando las mías…
Todas las tardes, cuando me iba…
Es la nostalgia de la sorpresa de mi madre,
cada vez que me acercaba a ella y la abrazaba…
Es la nostalgia de mi hija pequeña y sus correrías…
Es la nostalgia de mi nieta pequeña y sus juegos…
Ahora… Ahora recuerdo otros momentos bellos…
Cercanos y bellos… Entrar con Mili al Templo…
Sus ojazos que lo querían abarcar todo…
Las luces, los cirios encendidos, el Santísimo…
Su próximo Bautismo… Ahora… A los ocho añitos, su Bautismo…
Ahora el ocaso anida en mis manos y se fuga…
Hacia los témpanos… Hacia las dunas… Hacia los prados floridos…
Hacia los lejanos muelles… Hacia los cerros, hacia la bruma…
Hacia los acantilados… Hacia la costa emergiendo
poblada de sueños… De azules y dorados sueños…
Hacia la arena y la espuma… Hacia las nomeolvides y las petunias…
Ahora… Ahora… En este instante que deseo atrapar y que huye…
Ahora… Cuando mañana será otro día, otro atardecer,
y éste habrá pasado como tantos…
Pero cada uno es único, distinto, efímero, bello y nuevo…
No olvido tu recuerdo… Siempre estás en mis oraciones
y en mis nostalgias… Que seas feliz… Que sueñes…
Ahora… Ahora… El ocaso se debilita entre mis dedos…
Sale del teclado y huye… Escapa, escapa…
Evade los encuentros… Evade las nostalgias… Evade los recuerdos…
Los dolores, las emociones, la soledad, la pesadumbre…
Evade todo lo que enferma, marchita y duele…
Se queda allá... Donde todo es posible...
y quizás también, pueda ser posible lo imposible…
Lo imposible de esta realidad... No de la otra...
ALLÁ, EN EL REINO, TODO LO BELLO Y BUENO ESTARÁ.
SERÁ POSIBLE. LO SERÁ. SIN NINGUNA DUDA.
Sí: ahora hay un suave resplandor en mi ventana...
Tenue... Silencioso... Fugaz... Leve... Efímero...
AHORA... AHORA.
* LILIANA ESCANES, desde mi humilde rincón de “LA CASA AZUL DE LA POESÍA”,
Septiembre 17, 2021, Bahía Blanca, Argentina *
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