sábado, 12 de diciembre de 2009

Delfina Acosta-Parguay/Diciembre de 2009



Vuelvo pronto


Tras un hombre que amé en la primavera
se marchó mi vestido, enamorado.
Él me abrazó diciendo "vuelvo pronto".
La flor que me dejó arrugó mis manos.

Mi chal de Cachemira se llevó
quien me acostó a la sombra del verano,
y mudó a sus mejillas mi color,
y la sal de sus besos a mis labios.

Mi abrigo beige que calentó un otoño
me lo quitó, sobre el sofá, jugando,
el hombre de otra, que me dijo hallar
de soledades llenas nuestras manos.

Que todo se llevaron. Fue muy fácil
bajar el cierre de mis dos leopardos,
arrugar mis vestidos, deshojar...
A veces me sangraban los costados.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Delfina: muy lindo poema. Sentido, melodioso y con un dolor pegado a los costados. Un abrazo, Laura Beatriz Chiesa.

Juan Caceres Quiroga dijo...

Hermoso poema que traza las suspicacias del Amor.
Metáforas llenas de sensualidad y un lápiz que dibuja imágenes.
Realmente me encantó.
JCQ_