II
El sol ascendió. Barras verdes y amarillas cayeron sobre la playa dorando los costillares de la consumida barca, acerando las algas. La luz perforaba las delgadas y rápidas olas, quienes se deslizaban, como abanicos sobre la arena.
La muchacha al sacudir la cabeza hizo bailar las piedras preciosas, el topacio, el aguamarina, todas las piedras con chispas bajo los líquidos colores, dejó al descubierto su piel, trazó un recto sendero sobre las olas, cuyos destellos de escamas se oscurecieron.
( de : cartas marinas)
(Este poema pertenece a una serie premiada en el Concurso Literario: Junín País )
6 comentarios:
BELLO BELLÍSIMO!!! CON ESA HERMOSURA TIBIA Y MOJADA DE NUESSTRA COSTA. TE FELICITO, SYL
Silvia: muy lindo poema, una pintura de la palabra. Te abraza,
Comparto las palabras de quiénes me anteceden....
Muchacha mágica en un mar de ensueño...
Gracias por estas palabras que me dejan..es como un alimento,abrazos,
Silvia Loustau
Silvia, leerlo cuatro veces y quedarme pensativo;fué la sensación de estar frente a un cuadro.
Gracias por el regalo.
Abel Espil
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