sábado, 12 de diciembre de 2009

Emilio Nagy Gyuris-Olavarría, Provincia de Buenos Aires, Argentina/Diciembre de 2009



A la sombra del pino

Francisco estaba cargado. Su arma, también.
Sabía cómo lo haría: rápido y a quemarropa. Finalmente, le dispararía a su hermano...
Francisco se quedó quieto, agazapado en la sombra de un pino del jardín delantero de su casa; sólo una esquina separaba a los hermanos.
Veinte baldosas después, Francisco apretó dos veces el gatillo de plástico de su pistola de agua.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Emilio: breve y muy buen cuento. Un abrazo, Laura Beatriz Chiesa.

Anónimo dijo...

¡Ah, mi querido osito Gyuris! otro amague me habeís hecho degustar jeje... muy bueno, felicitote.

Juego de niños contado con un narrador adulto y con buena puntería.

Abrazote y a seguir escribiendo, amiguito Emi :)

Juanca.

Juan Carlos (Abuelo) dijo...

"Si lo breve dos ......."
Muy buen relato con madurez que ya se nota. Besos (Abuelo)

Gabriel (El Padre de la Criatura) dijo...

Como diría un amigo español, "Del Copón!", percibo que vas por la senda adecuada, un beso.

Anónimo dijo...

Pequeño y gran escritor: Felicitaciones! Me encantó el cuento.
Mirta

Ana (de Loma Negra) dijo...

Si el cuento es corto... el comentario también lo es:

IMPECABLE, EMI!!

Un beso

yela dijo...

me encantó el final, no esperaba menos de vos.

Anónimo dijo...

Emi me hiciste asustar!!! Gracias por el final, me relajé!!!
Espectacular!!!
Beso enorme pequeño gran escritor!

Anónimo dijo...

La anterior soy yo Viviana de Loma Negra. Siempre me olvido de poner el nombre!!!!