LA CASA DE ASTERION
DE
JORGE LUIS BORGES
(Buenos Aires, 1899 - Ginebra, Suiza, 1986)
Escritor argentino considerado una de las grandes figuras de la literatura en
lengua española del siglo XX. Cultivador de variados géneros, que a menudo
fusionó deliberadamente. Jorge Luis Borges ocupa un puesto excepcional en la
historia de la literatura por sus relatos breves. Aunque las ficciones de
Borges recorren el conocimiento humano, en ellas está casi ausente la condición
humana de carne y hueso; su mundo narrativo proviene de su biblioteca personal,
de su lectura de los libros clásicos, y ese mundo libresco e intelectual lo
equilibran los argumentos bellamente construidos, simétricos y especulares, así
como una prosa de aparente desnudez, pero cargada de sentido, y de enorme
capacidad de sugerencia.
LA CASA DE ASTERIÓN
COMENTARIO
Interesante relato en la genial pluma de Jorge Luis Borges, basado en la
historia del Minotauro, el Laberinto, Ariadna y Teseo.
Para poder encontrar la interpretación cercana a lo que su autor pretendió, es
necesario adentrarse en la mitología griega y entender las proyecciones de esta
obra en la vida del escritor, quien contó desde temprana edad con un gran
bagaje intelectual, siendo gran estudioso de los clásicos.
Al comienzo hace referencia a Apolodoro, quien fue un griego que hizo un
compendio sobre la mitología griega, señalando además los capítulos en
referencia.
Aparentemente es un relato fantástico relacionado con la historia del
Minotauro. Al escarbar en su contenido descubrimos al escritor mismo, un
trasfondo que descubre al hombre que está detrás del escritor. En cierta forma
una justificación de sí mismo, en ese pedestal casi divino en que siempre se
colocó, diferente al resto de los humanos.
Empieza aseverando las acusaciones de las cuales es objeto, conciente de ellas,
aceptándolas como algo propio de él. Incluso piensa en una venganza. Habla de
su yo interno, donde no guarda sentimientos, no hay un solo mueble en la casa...refiriéndose
a ellos. Él es un prisionero de sí mismo. Su madre fue reina, por lo tanto él
no se puede confundir con el vulgo.
Al comienzo hay una frase que da la pista principal a la historia, dice: Y
la reina dio a luz un hijo que se llamó Asterión. Por lo tanto, él es sin
duda Asterión, es único y no le interesa lo que otros hombres puedan
transmitir. Considera que el arte de la escritura no es una forma de
comunicación, sino más bien un arte en sí. Asterión, está más allá del
significado de las palabras, por ello a veces su tiempo de crear es largo.
No le faltan distracciones, pues su espíritu porfiado como un carnero, corre
por las galerías de su propio laberinto mental, jugando, permanentemente solo,
incluso hasta dañarse. Es un solitario, que sólo vive consigo mismo, a veces
sufriendo, otras gozando, imaginando otras vidas similares a la suya...El de
otro Asterión, igual a él, a quien invita a conocer su mundo.
Habla de cisterna, de aljibes. Ambos términos corresponden a surtidores de
agua. Agua es un elemento que limpia, que refresca, que purifica. Asterión lo
necesita.
Para el autor, este juego mental ha determinado toda su vida. Y siempre está
allí, ese laberinto donde no se encuentran cosas simples, los pesebres (La casa
modesta de un rey), abrevaderos (El lugar donde los seres comunes y corrientes
o los animales, sacian su sed), patios (Sitios de recreo) y aljibes (Fuentes de
redención) Y son catorce, como lo son en número cabalístico los sacrificios que
el Minotauro exige, para calmar su infinito poder. Ese ser poderoso exige
sacrificios. Sin embargo, Asterión, tan importante como el sol, su mente (casa)
ha creado tanto que ha perdido la cuenta, no está dentro de los sacrificados.
A continuación se refiere a nueve años... Puede referirse a novena, número
mítico del mundo cristiano que significa redención, tal vez perdón,
refiriéndose a otros hombres, que igual caen en su laberinto ensangrentado.
Ellos son sus detractores, que se destruyen sin su intervención.
Sin embargo, uno de ellos le profetizó su fin, talvez un doctor y ello le
quitó el dolor de la soledad pues sabe que existe un ser que lo redimirá,
aunque su concepción de él es diferente a la de los demás. Se lo imagina como
un ser mítico y lo asocia al Minotauro o talvez podría ser igual a él mismo.
La espada de bronce, el sol de la mañana y ni un vestigio de sangre. El está
enfermo, su fin está próximo
La frase final.- ¿Lo creerás, Ariadna?- Dijo Teseo- El minotauro
apenas se defendió.... A Marta Mosquera Eastman.
Es la duda sobre la existencia de un Dios omnipotente, al cual un hombre como
Teseo lo eliminó, o es solamente una leyenda de su gran poder. Marta Mosquera,
en este momento es Ariadna, a quien el autor dedica esta reflexión mediante un
hilo que a lo mejor esta mujer le entregó al comenzar su relato, para no
perderse en su propio laberinto. El hilo de la amistad, la simpatía o quizá una
pequeña relación con algunos determinados seres.
Un gran escritor, cuya vida de semidiós, lo convirtió en un solitario
prisionero dentro de su propio laberinto, esperando el encuentro final con un
Dios, del cual ni siquiera estaba seguro de su grandiosidad.
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